Tener mala letra se puede considerar un defecto pero un gran número de estudios ha determinado que en realidad se trata de una virtud.
La explicación científica se encuentra en que la mente de este tipo de personas trabaja más rápido de lo que pueden moverse sus manos y por tanto, piensan mucho más rápido de lo que escriben, característica propia de personas con un IQ más elevado.
Según el estudio realizado por Howard Gardner, profesor de psicología de Harvard, estas personas son más inteligentes y su mayor creatividad y agilidad les lleva a tener una escritura mucho más veloz, lo que provocará que las letras no estén bien definidas y tenderán a hacer abreviaciones en las palabras.
También el avance de las nuevas tecnologías y la ciencia han provocado que se realicen estudios para ver si estas realmente son útiles en los procesos de aprendizaje o si han provocado el olvido de algunas capacidades. El uso de aparatos digitales para escribir está cada vez más estandarizado, sobre todo entre los jóvenes, lo que ha provocado que la preocupación por el estilo de la letra pase a un segundo plano.
Sin embargo, la caligrafía no sólo sirve para determinar la inteligencia de una persona, sino también muchos otros rasgos de su personalidad.
Existe una pseudociencia (ya que se basa en suposiciones), todavía por explotar, que se basa en el estudio de la personalidad, del carácter, del equilibrio mental y del origen de las emociones a través de la escritura y se denomina grafología.
Su estudio puede resultar muy interesante en distintos ámbitos, como por ejemplo en el jurídico y por ello, la empresa de formación Euroinnova Business School, ofrece ciertos cursos relacionados con la grafología, como por ejemplo el Curso de Especialista en Pericia Caligráfica + Titulación Universitaria en Grafología.
Desde Euroinnova también se ofrecen otros cursos de gran interés relacionados con muchas áreas de conocimiento como por ejemplo la educación o los idiomas, muy necesarios en la actualidad dentro del mundo laboral debido a la globalización.
Artículo original Tener mala letra como señal de inteligencia publicado en comunicae.es