De este informe se desprende que el número de concursos de acreedores, publicados en el BOE, que no se refieren a personas físicas y a los declarados y concluidos en el mismo edicto en Madrid y Barcelona, ha sido dispar. En concreto, durante 2017 la actividad concursal ha descendido un 23% en la Ciudad Condal y ha aumentado un 9% en Madrid, en comparación con 2016.
Además, los procedimientos de insolvencia declarados y concluidos en el mismo auto se han incrementado un 4% en Barcelona y un 16% en Madrid. En total, el número de concursos declarados y concluidos alcanzaron durante el pasado año la cifra de 244 en Barcelona, lo que supone un 40% del total de sociedades concursadas, y de 159 en Madrid, lo que representa el 23% del total de sociedades concursadas.
Por su parte, el número de concursos de personas físicas deudoras declaradas insolventes durante 2017 ha sido de 167 en Barcelona y de 71 en Madrid. Pese al incremento con respecto a 2016, desde Insolnet apuntan que dichas cifras “no hacen más que constatar el fracaso de la reforma implantada, denominada de la segunda oportunidad”.
Disparidad del activo concursado en Madrid y Barcelona
En cuanto al activo de las empresas concursadas, el informe anual arroja una diferencia muy acusada entre Madrid y Barcelona. Según la información disponible de las últimas cuentas anuales depositadas en los Registros Mercantiles, el activo de las tres primeras empresas concursadas de Madrid durante 2017 fue de: 789.021.394,00 €, 492.334.594,00 € y 356.374.394,00 €, mientras que en Barcelona el tamaño de los activos fue de: 84.571.502,00 €, 47.319.880 € y 29.131.160,00€.
En total, las diez empresas concursadas con mayor activo en la capital representan el 64% del total de los activos concursados, frente al 42% que supone el tamaño de los activos concursados de las diez empresas de la Ciudad Condal.