Cada reloj pasa por un trabajo de búsqueda y cuidado, para que dentro de la sencillez de cada pieza se transmita la pasión que lleva a fundar Karl Gerrit, donde el dorado de las piezas transporta a los amaneceres del Mediterráneo, y el azul vibrante de las olas se plasma en las correas, la elegancia y serenidad de la noche se refleja con relojes negros en su totalidad.
Carlos Heredero, joven fundador de la marca nacido en Dénia (Alicante), está presente en todo el proceso de elaboración, garantizando que cada reloj cumpla con los requisitos planteados en el momento que se concibe la firma: calidad, precio y diseño. Las correas están hechas en cuero por artesanos valencianos, poniendo en cada pieza el sello de la costa levantina en los 18 procesos manuales por los que pasa cada una, lo que garantiza que ninguna sea igual que otra. En la maquinaria, no se ponen fronteras terrenales ni de calidad, el trabajo se realiza con proveedores a nivel mundial buscando elementos que se adapten a las necesidades de calidad exigidas.
La relación entre Karl Gerrit y el cliente se basa en la confianza y la transparencia, la marca cuenta con un servicio técnico propio y un sistema de respuesta inmediata en la web, mediante los cuales el consumidor puede resolver sus dudas y solucionar cualquier problema que se pueda plantear.
Actualmente, Karl Gerrit cuenta con dos colecciones. La primera, Kairós, se deriva del concepto mitológico y filosófico de la cultura griega clásica (cuna y origen de la cultura mediterránea contemporánea), haciendo referencia al factor cualitativo –y no cuantitativo– del tiempo. La colección está disponible en dos tamaños (33 y 41mm) y se distingue del resto por tener dos agujas (horas y minutos, en relación a la búsqueda de la esencia del reloj en el siglo XXI). Por su parte, la colección Bitácora (40mm), con modelos de tres agujas y un diseño más sport, se inspira no sólo en la náutica y en la vela como el deporte que unió todas las costas mediterráneas, también como estímulo de todas las aventuras que invita a vivir Karl Gerrit a sus clientes.
Tal y como afirma el creador “la era digital, las nuevas tecnologías y los nuevos dispositivos móviles deben hacer que nos replanteemos la relación y función entre las personas y el reloj”, a partir de esta percepción emana su planteamiento de la relojería, basada en rescatar la esencia de la misma y fundirla con la belleza de los paisajes en los que se inspira.