Detrás de este aumento está el crédito hipotecario, que sigue creciendo debido a los tipos de interés, en mínimos históricos, y a la apertura del grifo por parte de las entidades financieras. En opinión del experto, “los grandes bancos continúan sufriendo importantes pérdidas en algunos mercados internacionales, especialmente en países de Latinoamérica, como Brasil o Venezuela, y esto ha hecho que busquen ingresos en España. La concesión de créditos a empresas y particulares es una buena vía, por eso cada vez se conceden más y mejores hipotecas”.
Otro factor que hace más atractiva la compra de vivienda es la escalada en los precios del alquiler, pero que también hace que el precio de la vivienda en venta se incremente. “El mercado del alquiler, que está saturado y no deja de subir el precio, está haciendo el resto, especialmente en las grandes ciudades, las más turísticas. En Madrid o Barcelona ahora es más atractivo comprar que alquilar, y esto hará que el precio de venta también suba”, añade Molet. “Tanto en las Islas Baleares como en las Canarias ocurrirá lo mismo”.
En el aumento en el número de transacciones, y en consecuencia en la recuperación del sector inmobiliario, también influyen otros factores: la mejora de las exportaciones, por primera vez de bienes de equipo, herramientas, automóviles y alimentación; el crecimiento del PIB en el último año y las excelentes previsiones para este; la previsión de crecimiento en la creación de empleo y en el sector turístico; los precios bajos en el petróleo y, en general, el crecimiento en el nivel de confianza en la recuperación económica.
No obstante, aún hay regiones de España donde no está llegando a la misma velocidad la recuperación del sector. Según datos del consultor Eduardo Molet, Asturias y Galicia se mantendrás en el vagón de cola, ya que aquí la subida de precios seguirá resistiéndose.