Los sellos de caucho forman parte ese pequeño grupo de herramientas de oficina que parecen no poder ser sustituidas por las nuevas tecnologías.
Los sellos de caucho continúan, y parece que lo van a seguir haciendo durante muchos años, siendo imprescindibles en determinados departamentos de casi todas las empresas. Un pequeño instrumento que sí se ha beneficiado de avances tecnológicos en su fabricación. Desde luego que se siguen fabricando los tradicionales sellos de caucho montados en madera con variedad de formas y tamaños. Algunos de éstos siguen siendo verdaderas piezas elegantes a pesar de los años que tengan.
Los modernos sellos de caucho se aprovechan de los avances técnicos. Se producen con láser, la mayoría de sus elementos son reciclables, en su fabricación se han disminuido drásticamente las emisiones de CO2 y son muy económicos.
Tipos de sellos de caucho personalizados
Además de la facilidad de uso, común a todos los sellos de caucho, los sellos personalizados hacen posible incluir los datos de nuestra empresa, consolidando en ese pequeño detalle nuestra marca e imagen. La marca de una empresa no se fija en la mente de los consumidores solo con una gran campaña de publicidad. Algo tan modesto como un sello de caucho personalizado, pero que todo el mundo reconoce, puede ser una manera de afianzar en nuestros clientes, visitantes o del público en general nuestra imagen.
En la elección del sello de caucho merece la pena invertir un poco de tiempo. La variedad es grande: automáticos, en seco, de goma, fechadores, etc. Empezando por la forma: cuadrados, rectangulares, redondos u ovalados. Siguiendo por el tamaño: desde sellos de bolsillo, pequeños y de muy fácil transporte hasta sellos montados en metal con una placa de texto de 106 x 55 mm, que también puede incorporar un logo.
Para el diseño del sello debemos recordar algunas cosas que, en principio parecen obvias pero, no siempre se tienen en cuenta. El sello incluirá el logo de la compañía, los datos de contacto, los de su web y sus redes sociales, para facilitar al máximo el contacto con la empresa.
Por lo que se refiere al mantenimiento, basta limpiarlos de vez en cuando con alcohol, mantener la almohadilla con tinta y cambiar la goma cuando el desgaste de la misma lo aconseje.
También hay hoy disponibles en el mercado sellos automáticos que llevan incorporada la almohadilla con tinta y así la matriz queda entintada después de cada uso. Son más cómodos de usar y de transportar de un sitio a otro y más limpios, ya que el sello no toca ninguna superficie cuando no se usa.
Junto a los sellos personalizados, siguen siendo de uso muy común los sellos fechadores, los numeradores y los de firma. Si en nuestra empresa necesitamos sellar muchos documentos, es recomendable el uso de sellos profesionales de estructura metálica, mucho más resistentes y duraderos que los de madera o plástico. Tienen un precio más elevado pero a la larga resultarán más rentables.
Los sellos de caucho tienen también muchos usos fuera del entorno de las oficinas como, por ejemplo, los usados en los controles de acceso a discotecas o grandes eventos; los usados para marcar la ropa que los niños llevan al colegio o los de boda, que permiten a los novios hacer un diseño totalmente personal y sustituyen a la tradicional invitación.