2) Una batería de media tonelada: Sus 450 kilos representan una tercera parte de lo que pesa todo el coche. Por eso, “su colocación ha sido uno de los mayores retos que hemos afrontado”, afirma Xavier Serra, director técnico de este proyecto. Es tan grande y pesada, que su volumen ha tenido que repartirse por toda la parte inferior del coche para preservar su equilibrio y funcionalidad.
3) Cuatro motores para un coche: “La potencia es, sin duda, uno de los aspectos que más sorprende de este vehículo”, afirma Xavier Serra. Este modelo lleva cuatro motores, situados en la parte posterior, que hacen que “el CUPRA e-Racer alcanza las 12.000 revoluciones, frente a las 6.500 de un vehículo de competición de gasolina y todo con una sola marcha”, confirma Serra.
4) Un diseño ganador: “Ganar en aerodinámica era el objetivo principal”. Por ese motivo, los retrovisores han sido substituidos por mini cámaras, para que “el coche tenga más dinamismo”, añade Serra. El conductor visualiza todo lo que sucede a su alrededor en una gran pantalla integrada en el salpicadero.
5) Un mosquito sobre el asfalto: Serra asegura que la sensación al volante es diferente a la de un coche de gasolina y que lo primero que sorprende es “su aceleración”. El sonido de este vehículo es también algo nuevo: “A diferencia de un vehículo tradicional, este eléctrico emite un sonido similar al de un mosquito”.
6) De un León a un coche de competición: El nuevo modelo CUPRA e-Racer toma como base el chasis del SEAT León. A esta estructura se le añaden elementos de seguridad, como el arco de seguridad interior, para adecuarlo a la competición.