En principio, la libre movilidad de bienes, servicios, capital, empresas y personas favorece una mejor asignación de los recursos y redunda en una mayor eficiencia y crecimiento económico. Además, contribuye a la difusión de la tecnología, el conocimiento, la cultura y la información a través de las fronteras, facilitando, por tanto, la convergencia de la renta per cápita entre países. Sin embargo, alguna evidencia empírica reciente cuestiona alguno de estos efectos, al menos en el corto plazo. En concreto, se argumenta que, al favorecer la deslocalización de determinadas actividades y puestos de trabajo, la globalización podría ser uno de los factores responsables del aumento de la desigualdad en la distribución de la renta dentro de los países.
En este contexto, esta nota presenta una síntesis de la literatura reciente sobre globalización e integración económica1 , y sus implicaciones para el crecimiento y la distribución de la renta. En la siguiente sección, se describen sus manifestaciones más directas a través de diferentes canales, como el comercio de bienes, la migración y los flujos de capitales, para centrarse, en la sección que viene a continuación, en sus posibles implicaciones. Algunas de las respuestas de política económica para tratar de mitigar los efectos negativos de la globalización se detallan en la cuarta sección.
En las últimas décadas, muchos países avanzados y, de forma especialmente marcada, las economías emergentes (que partían de niveles de apertura a los intercambios de bienes y servicios muy bajos) se han embarcado en programas de liberalización comercial a gran escala. En 1960, únicamente el 22% de los países (que representaban el 21% de la población mundial) tenían una política de apertura comercial. Sin embargo, en el año 2000, alrededor del 73% de los países (que representan un 46% la población mundial) estaban abiertos al comercio internacional (véase gráfico 1). La mayor parte de los cambios en la política comercial se han implementado mediante reformas para reducir los aranceles (y las barreras no arancelarias) a las importaciones en los mercados domésticos. (Ver boletín completo en el PDF)
Fuente: BDE