El apeadero de tren que data de finales del siglo XIX, declarado BIC en el 2004, forma parte de la extensa red de patrimonio industrial con la que cuenta la provincia de Huelva, legado de la presencia de los ingleses en la zona y que ahora, convertido en establecimiento hotelero y restaurante, se pone al servicio de todo aquel que quiera disfrutar de un lugar con encanto en la comarca.
De esta forma, de manos de la iniciativa privada se logra que un vestigio de ese valor histórico pueda permanecer en pié siendo ello posible dada la cesión del espacio por parte de la Fundación Rio Tinto, cuyo director general, José Luis Bonilla, estuvo también presente en el acto.
Los representantes institucionales coincidieron al señalar la importante apuesta de los propietarios de 'Casa Idolina' por poner en valor un espacio con más de un siglo de historia que merecía ser conocido, con el que se pone de manifiesto el valioso catálogo de edificaciones ligadas a la actividad minera con el que contamos, que debe servir de ejemplo en otros puntos donde existen vestigios de semejante naturaleza a los que se les debe sacar le mejor partido posible.