El aumento de la demanda de viviendas en alquiler, sobre todo en las capitales, favorece que las personas mayores opten por una renta vitalicia, que les proporciona una renta mensual cada vez más alta.
En un momento donde el país alcanza un nuevo máximo histórico en cuanto a envejecimiento de la población: 120 mayores de 64 años por cada 100 menores de 16, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), las rentas vitalicias también alcanzan cifras importantes
La decisión de muchos mayores de vivir juntos para combatir la soledad es una opción cada vez más extendida.
Este cambio demográfico y de costumbres está modificando en gran medida el mercado inmobiliario, que debe adaptarse a estos cambios y
Vittalias, con una experiencia de más de 30 años ofreciendo servicios a la gente mayor, prevé un crecimiento del número de contratos de renta Vitalicia del 100% en 4 años, así, si en 2020 se prevén 17.000 firmas de esta modalidad.
La alta demanda de pisos en alquiler que contrasta con la escasez de oferta junto con el debate social sobre el futuro de las pensiones y las reformas fiscales son los responsables de que cada vez más los mayores opten por una renta vitalicia para obtener ganancias mensuales que les ayudarán a combatir los apuros económicos por los que pasan.
Esta alta demanda de pisos en alquiler permite ofrecer mejores rentas mensuales a los mayores que optan por la Renta Vitalicia, un contrato mediante el cual las personas mayores perciben una renta durante el resto de su vida a cambio del traspaso de la propiedad de sus viviendas, pero manteniendo siempre el derecho de uso y disfrute de la misma durante el resto de su vida.
Esta opción se impone claramente en Madrid y Barcelona donde el alto valor de los inmuebles hace que la Renta Vitalicia sea especialmente interesante dado que se está obteniendo de media una renta mensual de 950 euros.
La atractiva fiscalidad de la renta vitalicia
La Renta Vitalicia goza de una excelente fiscalidad y tributación, así, cuando se establece sobre una vivienda no habitual, la ganancia obtenida resulta exenta del IRPF hasta un límite de 240.000€ por contribuyente y siempre que la renta vitalicia se constituya en un plazo máximo de seis meses.
Las personas de 70 años o más se benefician de la mayor exención fiscal, aplicándose la retención de IRPF (actualmente un 19%) únicamente sobre el 8% de la totalidad de rentas percibidas, lo que a efectos de simplificar supone el 1,52% de retención.
Respecto a las rentas vitalicias percibidas, no habría obligación de declaración cuando los importes totales de la base percibida fuera inferior a 1.600 euros anuales (por ejemplo, en el caso de personas de 70 años o más, la base sometida a retención es del 8%, por tanto para superar la base de 1.600€ que obliga a declarar, las rentas deben superar los 20.000€ anuales).