La primera computadora en la universidad española hizo su aparición en 1968, marcando el comienzo de ocupaciones del Centro de Cómputo. Después de décadas de aislamiento cultural, artistas, arquitectos y los músicos comenzaron a reflexionar sobre los usos de las computadoras dentro de sus procesos creativos. El Centro de Computación se convirtió en el espacio más significativo para la libertad creativa al final de la dictadura, afirmándose como una estructura colectiva para experimentación, en un contexto en el que la reunión «tenía significado especial, casi subversivo. »
La inmunidad proporcionada por el aura aparentemente no ideológica en tecnología permitió al Centro desatar un impulso sin precedentes para la innovación española que se mantuvo en una continua gestación. Después de la doble ruptura: el colapso del bloque cultural impuesto por el régimen político y el borrado de límites entre diferentes campos creativos, nuevas formas de expresión y experimentación fueron desbloqueadas.
Al construir «puentes entre el mundo real y un mundo virtual, mundo imaginario, »el Centro de Computación abrió por escrito a horizontes de experimentación más amplios, como música y artes visuales que se inspiraron en las nuevas teorías lingüísticas de Noam Chomsky (gramáticas generativas) y la estética de información de Max Bense, tanto como el legado del experimento español en poesía.
La exposición muestra de forma exhaustiva el trabajo histórico de Javier Seguí de la Riva, y forma el corpus necesario para entender el contexto del período y los enlaces a obras de arquitectos y artistas que cuestionaron permanentemente la cohabitación entre lo imaginario y experimental. Las formas móviles de José Luis Alexanco, junto a la figura imposible de José María Yturralde o dialogando con la poesía de Ignacio Gómez de Liaño y Guillermo de Searle.
Esta primera exposición en Francia, en Frac Centre-Val de Loire introduce la escena experimental española de la década de 1960 y década de 1980 en un paisaje de radicalismo Europeo y Estadounidense, a través de la perspectiva de una arquitectura utópica – Radical Architecture de Italia, Visionary Austrian Architecture, English Pop Architecture o The Prospective Vision en Francia.