Motor

Nueva generación del ya mítico Mazda MX-5

La primera generación se presentó al público el 9 de febrero de 1989

Mariano García Viana | Jueves 06 de septiembre de 2018
Los diseñadores e ingenieros de Mazda habían creado un biplaza descapotable con motor en posición delantera longitudinal y tracción trasera, suspensiones de doble trapecio, una perfecta distribución del peso al 50:50 entre los dos ejes y bajo momento de inercia. Todo para una agilidad máxima y a un precio asequible. Se convirtió instantáneamente en un éxito a escala mundial.

¿Cuál fue el secreto de ese éxito? Que el Mazda MX-5 tendió un puente entre generaciones. Por un lado, su atractivo conquistó al instante a los conductores que conocían de primera mano los míticos deportivos europeos de los 50 y los 60. Y, por otro, también se supo ganar a toda una nueva generación de conductores más jóvenes que casi no podían creer que cupiera tanta diversión en un pequeño vehículo de apenas 955 kg, con una motorización modesta pero extraordinariamente ágil. En los años que siguieron, los principios esenciales del Mazda MX-5 se preservaron meticulosamente. Tanto fue así que, en los modelos de segunda (1998), tercera (2005) y cuarta (2015) generación —incluido el Mazda MX-5 RF de 2016—, una de las consignas era que la inconfundible silueta de este automóvil resultara reconocible al instante a 100 metros de distancia.

Cuando, en mayo del año 2000, la producción llegó a 531.890 unidades, el pequeño Mazda entró en el Libro Guinness de los récords como el roadster biplaza más vendido de todos los tiempos. La producción total rompió la barrera del millón de unidades en abril de 2016 y el certificado Guinness se puso al día. A día de hoy, las ventas totales del Mazda MX-5 ascienden a más de 1.055.000 unidades. A lo largo de sus 29 años de historia, el Mazda MX-5 ha recibido más de 280 premios en todo el mundo. Estos años no son solo el relato de la búsqueda incansable de una sensación de conducción única, en la que el conductor y su vehículo se funden en una misma entidad; también son un testimonio del largo camino que ha llevado a Mazda a crear un placer de conducción con un estilo inconfundible.

El Mazda MX-5 de cuarta generación se desarrolló bajo el concepto “Disfrutar del momento, disfrutar de la vida”.
Tras la presentación del modelo de capota blanda en 2015, a finales de 2016 se añadió a la gama otra versión, esta vez con techo rígido eléctrico: el Mazda MX-5 RF. Gracias a estas dos personalidades contrapuestas, el Mazda MX-5 acerca el placer de conducir un descapotable a un público más amplio, manteniendo intacta la emoción inimitable de la experiencia Jinba Ittai, la seña de identidad de Mazda. Masashi Nakayama, jefe de diseño y director del programa del Mazda MX-5, ha hablado de esta última versión con estas palabras: “El concepto clave del desarrollo de la cuarta generación del Mazda MX-5 fue ‘innovar para preservar’; estoy convencido de que este coche ha mantenido su atractivo durante tanto tiempo como resultado de nuestro compromiso de refinarlo de manera incesante a lo largo de sus 29 años de historia”. Y añadió, “Tenemos la intención de continuar evolucionando, buscando nuevas formas de hacerlo aún más apasionante y satisfactorio de conducir, para que siga ofreciendo a los conductores emociones únicas y para afianzar aún más su condición de icono cultural”.

Guiados por el deseo de Nakayama-San de seguir potenciando sus valores esenciales, esta nueva versión 2019 presenta refinamientos en el diseño y la estructura interna, mejoras en el comportamiento dinámico y novedades en las tecnologías de seguridad i-ACTIVSENSE de Mazda. Se han introducido amplias mejoras en el motor de gasolina 2.0 l. SKYACTIV-G*, que combinan un mayor régimen del motor con una mayor entrega de potencia y par. El avanzado motor de gasolina 1.5 l. SKYACTIV-G también entrega más par, con unas cifras de consumo y un comportamiento medioambiental excelentes.

En el terreno del diseño, las novedades más llamativas son los colores de las llantas de aleación y la nueva capota de lona en color marrón, que estará disponible en la nueva versión especial MX-5 ST Nappa Edition. La ergonomía a bordo ha subido enteros con la introducción de un ajuste telescópico del volante, una función más ergonómica de reclinación de los asientos y una apertura de las puertas más cómoda. Para terminar, ofrecen cinco nuevas tecnologías de seguridad i-ACTIVSENSE, para mayor tranquilidad de los conductores del Mazda MX-5 2019. La primera es el Sistema de asistencia a la frenada en ciudad avanzado, que proporciona detección frontal de vehículos y peatones, ayudando a evitar colisiones. Se complementa con el Sistema de asistencia a la frenada en ciudad trasero, que detecta vehículos y obstáculos situados por detrás. Las otras novedades son el Detector de fatiga, el Sistema de reconocimiento de señales de tráfico y la Cámara de visión trasera.

El Mazda MX-5 de cuarta generación es el más ligero desde el legendario modelo original. Es más corto, más bajo y más ancho que la versión de tercera generación, y presenta los voladizos más cortos y el centro de gravedad más bajo hasta la fecha. La filosofía de diseño KODO — Alma del movimiento confiere al Mazda MX-5 un aspecto potente y sencillo, con las proporciones de los roadsters clásicos, al mismo tiempo que refuerza los valores básicos de agilidad, ligereza y placer de conducción de este coche, con una nota inconfundiblemente dinámica y contemporánea.

El Mazda MX-5 RF, que es diseño KODO con una interpretación fastback, combina el estilo y las proporciones equilibradas de la versión de capota blanda con una cabina compacta con forma de lágrima, que parece contradecir su naturaleza de descapotable. Las versiones de techo de lona y RF del Mazda MX-5 2019 están disponibles en siete colores de carrocería, entre ellos el nuevo Soul Red Crystal Metallic. Los paneles del techo rígido del Mazda MX-5 RF pueden estar acabados en el color de la carrocería o en negro piano (disponible en el Pack Sport).Desde siempre, el Mazda MX-5 ha sido la máxima expresión del Jinba Ittai o la fusión entre el conductor y el coche. El cuadro de instrumentos orientado al conductor y los mandos son una parte esencial de esa prioridad por el placer de conducción.

Como es de esperar en un deportivo, la posición de conducción del Mazda MX-5 ofrece una armonía absoluta con el coche y la carretera. Los pedales, el volante y los relojes están organizados en un solo eje que sitúa en el centro al conductor con una simetría perfecta. Los pedales del freno y del acelerador están alineados para facilitar el movimiento del punta-tacón.Más que nunca, el Mazda MX-5 de cuarta generación está construido para ser una prolongación del conductor. Conserva su sencillez ergonómica tradicional, pero la complementa con altos niveles de calidad, refinamiento, confort y equipamiento; destaca especialmente el sistema de comunicación y entretenimiento MZD Connect de Mazda, con pantalla táctil en color de 7 pulgadas y mando HMI multimedia. Otro de los aspectos más destacados de la actual generación es su exclusivo techo duro eléctrico en tres secciones, gracias al cual la versión RF ofrece a los clientes lo mejor de los deportivos —el placer de conducir al descubierto— pero con la seguridad añadida de un cupé de techo duro. El modelo RF puede presumir del techo eléctrico rígido más rápido del mercado. Tiene un mecanismo excepcionalmente ingenioso y compacto, que se abre o cierra en tan solo 13 segundos, a velocidades de hasta 10 km/h.Todas las generaciones del Mazda MX-5 se han caracterizado por ofrecer un equilibrio perfecto entre potencia y peso.

Nunca ha habido una obsesión por las prestaciones a costa del precio y del equilibrio de conducción. A lo largo del tiempo, los motores del Mazda MX-5 han sido el compañero ideal del chasis, con una respuesta espléndida del acelerador y facilidad para revolucionarse. El último Mazda MX-5 monta versiones a medida de los motores de gasolina 1.5 l. y 2.0 l SKYACTIV-G, atmosféricos y de inyección directa, en ambos casos con una relación de compresión de 13,0:1 y un compacto sistema de escape 4-2-1 de colectores largos, adaptado al modelo y optimizado para elevar su entrega de par. Ambos propulsores ofrecen aceleración lineal desde parado hasta la línea roja y consumos sobresalientes en condiciones de conducción real. Para reducir aún más el consumo, el motor 2.0 l. SKYACTIV-G se encuentra disponible con el sistema de corte de ralentí i-stop de Mazda y con una versión aligerada del freno regenerativo i-ELOOP.

La configuración sigue siendo la clásica, con motor delantero en la parte media del vehículo y tracción trasera, más un cambio manual de seis velocidades de alta precisión. Adicionalmente, se encuentra disponible una transmisión automática de seis velocidades, solo para los modelos Mazda MX-5 RF con motor 2.0 l. SKYACTIV-G. Los ingredientes ganadores de este coche resultan más tangibles que nunca después de las notables mejoras introducidas en las motorizaciones de los modelos RF y Mazda MX-5 2019. Los dos motores han sido homologados conforme a los requisitos de las pruebas de homologación WLTP / RDE y cumplen la normativa de emisiones Euro 6d Temp. Conjuntamente con el SKYACTIV-Chassis —ligero, muy rígido y orientado a la conducción—, la suspensión delantera de doble trapecio y trasera multibrazo, y la dirección asistida eléctrica, el resultado es la experiencia de conducción Jinba Ittai más depurada que puede existir.

El modelo monta una versión del motor 2.0 l. SKYACTIV-G con mejoras importantes en todos los aspectos de la tecnología. Es más potente, gira a mayor rango de revoluciones y una acústica especialmente adaptada. El régimen máximo del motor se ha elevado de 6800 a 7500 rpm. La potencia ha crecido de 160 a 184 CV a 7000 rpm, mientras que el par máximo ha pasado de 200 a 205 Nm a 4000 rpm. Como resultado, las cifras de par y aceleración han mejorado en todo el rango de revoluciones, tanto en los modelos de capota blanda como en los RF, e incluso en la versión con motor 2.0 l. SKYACTIV-G y cambio automático. No obstante, el consumo sigue siendo excelente y cumple la normativa RDE europea.

El renovado 1.5 l. SKYACTIV-G mantiene o incrementa el par con respecto al motor al que sustituye en todo el rango de revoluciones, gracias a la adopción de varias nuevas tecnologías que comparte con el nuevo 2.0 l. SKYACTIV-G. La velocidad máxima del motor es de 7.500 rpm, la potencia máxima crece ligeramente de 131 a 132 CV a 7.000 rpm, y el par máximo aumenta de 150 a 152 Nm a 4.500 rpm. Por supuesto, con unas cifras de consumo y emisiones contenidas.

La filosofía de Seguridad Proactiva de Mazda está en el origen del planteamiento articulado en torno al ser humano que guía el desarrollo de vehículos de la marca. Su objetivo es minimizar el riesgo de que se produzcan accidentes y maximizar las condiciones en las que el conductor puede controlar el vehículo de forma segura. El Mazda MX-5 ofrece altos niveles de seguridad, gracias a una robusta carrocería SKACTIV-Body combinada con las tecnologías i-ACTIVSENSE de seguridad activa y precolisión de Mazda, basadas en el uso de sensores. Todos los modelos montan de serie airbags frontales y laterales, y cuentan con monitorización de la presión de los neumáticos. A partir del acabado Evolution, están disponibles otros elementos tales como el Sistema de alerta de cambio involuntario de carril de Mazda, Faros led adaptativos, Control de ángulo muerto con alerta de tráfico trasera, Sensores de aparcamiento traseros, Limpiaparabrisas con sensor de lluvia y Retrovisor con función de oscurecimiento automático.

El equipamiento de seguridad activa de la gama del Mazda MX-5 2019 se ha reforzado con las siguientes adiciones:

-Sistema de asistencia a la frenada en ciudad avanzado (SCBS avanzado): consiste en una cámara de visión delantera capaz de detectar vehículos y peatones. Ayuda a evitar colisiones o mitiga los daños en caso de que se produzcan. Este sistema puede detectar otros vehículos a velocidades entre 4 y 80 km/h aproximadamente y peatones cuando el coche circula entre 10 y 80 km/h.

-Sistema de asistencia a la frenada en ciudad [marcha atrás] (SCBS R): utiliza sensores ultrasónicos montados en el parachoques trasero para detectar otros vehículos y obstáculos por detrás, durante maniobras marcha atrás a velocidades entre 2 y 8 km/h, aproximadamente.

-Detector de fatiga (DAA): analiza el ángulo del volante y la velocidad del vehículo, junto con información de la cámara de visión delantera. Lleva un seguimiento del estado del conductor cuando se circula a velocidades de autopista y le recomienda tomarse un descanso cuando lo considera necesario. Este sistema está diseñado para ayudar a prevenir accidents causados por fatiga o por una merma de la atención.

-Cámara de visión trasera: una cámara situada en el centro del parachoques trasero vigila la zona por detrás del coche. Su rango se extiende desde 0,18 a 5 metros por detrás del vehículo, y a una altura de hasta 2 metros. La pantalla muestra también el parachoques trasero para dar una indicación más clara de la distancia.

-Reconocimiento de señales de tráfico (TSR): la cámara de visión frontal detecta señales de tráfico; por ejemplo, identifica los límites de velocidad y señales de prohibido, y muestra el mensaje de la señal en el panel de instrumentos. Si el vehículo supera el límite de velocidad, el TSR avisa al conductor con un gráfico intermitente en la pantalla y hace sonar una alerta.