En primer lugar, es importante que sepamos exactamente qué queremos comprar y ceñirnos a esa lista, pues así no gastaremos dinero en artículos que no necesitemos. Aun así, desde HelpMyCash.com reconocen que es difícil resistirse a las gangas que se pueden ver durante el Black Friday, así que recomiendareservar una suma determinada a posibles caprichos de última hora.
En cuanto al presupuesto, tenemos que pensar cuánto dinero tenemos previsto gastarnos en total y en cada compra y no superar esa cifra por muchas ofertas que encontremos. Lógicamente, hay que mantener congelada una parte del saldo de nuestras cuentas para llegar sin problemas a fin de mes y, si nos queda margen, también para ahorrar.
En segundo lugar, si decidimos pagar nuestras compras a plazos para no afrontar su coste de golpe, debemos ir con mucho cuidado para no endeudarnos más de la cuenta. Lo ideal es que las cuotas de todos los créditos que pidamos durante el Black Friday y de los que ya tengamos vigentes no sumen más del 35% de nuestros ingresos mensuales netos. Si financiar una compra nos hace superar ese porcentaje, es mejor que no la llevemos a cabo.
Asimismo, es conveniente fijarse bien en las condiciones que nos ofrezcan: el interés aplicado, las comisiones, etc. Si tenemos tiempo, HelpMyCash.com aconseja comparar el préstamo que nos ofrezca la tienda con los concedidos por los bancos y otras entidades financieras, pues así podremos ver quién nos daría un crédito más barato.
En cambio, si optamos por utilizar una tarjeta de crédito, este comparador bancario recomienda usar la modalidad de pago a fin de mes, con la que no se devengan intereses. En caso de usar la de pago aplazado, es importante no seleccionar una cuota demasiado baja o un período de reembolso muy largo, pues eso incrementaría innecesariamente la deuda y podríamos tardar mucho tiempo en saldarla.
Y para terminar, desde HelpMyCash.com señalan que no hay que quedarse con la primera oferta que veamos, sino que debemos compararla con la de otros establecimientos. De este modo, nos aseguraremos de pagar lo mínimo posible por nuestro nuevo móvil, por unos vaqueros o hasta por los regalos de Navidad. En ese sentido, Internet y las redes sociales nos pueden ayudar a dar con las mejores promociones.
Además, puede ser conveniente mirar con antelación cuál es el precio original de los productos que nos interesen. Es de dominio público que muchas tiendas hacen la trampa de encarecer sus artículos justo el día antes del Black Friday para que sus descuentos parezcan mayores, así que cualquier precaución es poca para no caer en sus artimañas publicitarias.