Las damas del desierto en la Panda Raid 2019

Etapa rompedora con muchas trampas, zonas de arena y pistas de velocidad media con constantes cambios de ritmo y un final complicado por caminos muy pedregosos. A falta de la última jornada, con solo quince kilómetros cronometrados y un recorrido por carretera de 309 km hasta Marrakech hay un cuádruple empate en la tercera posición. id:43201

Se acerca el final de la prueba, aventura y expedición y el agotamiento comienza pasar factura, tanto a los pilotos y copilotos, como a los veteranos FIAT Panda. Son muchos días de carrera sometidos a un gran esfuerzo y no han sido pocos los que se han visto obligados a asumir grandes retrasos por pinchazos. Los fallos de concentración por agotamiento han provocado algún que otro vuelco, sin importancia cuando ha sido despacio y sobre la arena, y de mayor consideración cuando ha sido sobre el duro asfalto. La lista de abandonos forzosos seguirá creciendo pero tras la etapa cuarta ya se superaban los treinta equipos fuera de combate, ya sea por abandono o exclusión por exceder el tiempo otorgado para completar el recorrido.

La etapa cinco fue inesperadamente dura, con poco más de trescientos kilómetros para los que la organización daba nueve horas y media de tiempo para realizarla. Con esta información los pilotos más veteranos torcían el gesto y comentaban que sería una etapa dura porque la organización daba mucho tiempo sin que hubiera muchos kilómetros, de modo que sería difícil y lenta... como así fue. De nuevo el paisaje fue el gran aliciente por su enorme atractivo, con zonas de dunas de arena rojiza y extensas llanuras plagadas de pequeños cantos negros afilados como cuchillos que amenazaban a los neumáticos. Un raid es siempre una prueba automovilística de especial dureza. Combina la velocidad y destreza al volante con conocimientos básicos de mecánica y habilidad para desatascar el coche de la arena. En algunas ediciones del Panda Raid la presencia de participación femenina ha sido nula o meramente testimonial. Pero en el Panda Raid 2019 la presencia de la mujer es sobresaliente y está en fase de crecimiento. En esta edición hay cuatro equipos exclusivamente femeninos, y en total, hay ochenta y cinco damas distribuidas en los 392 equipos inscritos, muchas de ellas, la gran mayoría, en funciones de copiloto, pero una gran parte alternando el volante con sus compañeros varones y al menos media docena figuran como pilotos de los vehículos.

Los equipos femeninos en el Panda Raid 2019

Nagore Labrador-Vanesa Cuesta. Panda 4x2, equipo llegado del País Vasco, con poca o ninguna experiencia off road. "Ha sido un deseo de ambas, una idea, un reto, pero no lo hemos hecho a lo loco, somos amigas y queríamos vivir una buena experiencia juntas".

Ana Babarro-Lidia Vazquez. Panda 4x2
Madre e hija, vienen desde Galicia y es su segunda participación en el Panda Raid: "Lidia necesitaba un coche y yo necesitaba venir al Panda Raid, juntamos ambas cosas y aquí estamos. Para mí el Panda Raid es compañerismo. Nos ha pasado de todo y siempre se han parado otros equipos para ayudarnos. Nos quedamos atascadas en la arena y no nos habíamos bajado del coche cuando ya había gente ayudándonos a seguir adelante. Le dimos un golpe al cubrecárter y presionaba la caja de cambios y no podía meter las marchas, se pararon unos chicos y nos ayudaron. Para mí eso es el Panda Raid y yo se los recomiendo a todas las chicas que quieran vivir una experiencia así".

Eva Rodriguez-Imperio García. Panda 4x4
Eva e Imperio llegan desde Madrid y están aquí gracias a una acción de promoción interna de su empresa: "En nuestra empresa hay un gran ambiente y cuando supimos que podíamos hacer esta actividad nos apuntamos enseguida. Está siendo una experiencia sensacional y nos sentimos muy bien arropadas por todo el equipo. Conducimos un Fiat Panda 4x4 y no lo estamos haciendo mal porque dentro del equipo somos el único coche que no ha sufrido averías".

Ana Barbero - Ana Maria Cuenca. Panda 4x2
Dos cordobesas, Ana Maria estudiante de ingeniería mecánica de la Universidad de Córdoba y Ana Barbero, una experta en competición, tanto en rallyes como en circuitos. "Preparamos el Panda como actividad dentro del grado de mecánica de la facultad" nos explica Ana Maria, "pensamos que sería una actividad muy buena hacer competir el coche que estamos desarrollando. El equipo lleva dos unidades, en una viajan dos profesores de la universidad, y en este coche queríamos un equipo femenino, y para acompañarme busque a una mujer con experiencia en competición y si encima era de Córdoba mejor que mejor, y por eso pilota Ana y yo hago de copiloto".