La caja de cambios es automática de 7 velocidades de doble embrague y nos resulta un cambio de lo más discreto, es decir que su funcionamiento es tan perfecto que apenas se nota, tanto en las aceleraciones contundentes como en las deceleraciones en bajadas y frenadas rápidas. Su engranaje y sus relaciones están muy bien estudiadas y siempre selecciona la más adecuada en cada momento. En cuanto al comportamiento, el Talisman es un coche de lo más fácil de conducir. La postura ante el volante es la adecuada a nada que se adapten los asientos a la anatomía del conductor, todos los mandos están muy al alcance de la mano, la dirección es rápida y sobre todo contamos con dos elementos fundamentales para dar agilidad, eficacia y seguridad al vehículo, unas excelentes suspensiones y un sistema 4 Control. En el primer caso encontramos un sistema McPherson en el eje delantero, con su correspondiente barra estabilizadora y el trasero con rueda tirada es sumamente eficaz y fiel a la trayectoria. Esta “fidelidad” esta acrecentada por el segundo elemento ya mencionado, el sistema 4Control del que ahora hablaremos.
El Talisman, entre otras modernas tecnologías, cuenta con la denominada Multi-Sense que dentro de sus funciones controla dicho sistema 4 Control de cuatro ruedas directrices, así como la amortiguación pilotada. El sistema 4 Control está permanentemente activo. Por debajo del umbral de 50 km/h en modo confort (60 km/h en modo neutro y 80 km/h en modo sport), las ruedas traseras giran en la dirección opuesta a las ruedas delanteras, con una amplitud máxima de 3,5 grados. En términos de sensaciones, es como si el Talisman acortara su batalla en beneficio de la máxima agilidad. Por encima de este umbral, las ruedas traseras giran en el mismo sentido que las ruedas delanteras consiguiendo afianzar la trayectoria y evitar derivas de la parte trasera. Por su parte, la amortiguación pilotada adapta de forma permanente la reacción de los amortiguadores al estado de la carretera, a las condiciones dinámicas así como a las acciones del conductor: giro, cambio de carril, aceleración y frenado… A través de una electroválvula presente en cada amortiguador, el Talisman analiza continuamente las condiciones de circulación y ajusta su respuesta hasta cien veces por segundo. El conductor puede elegir entre cuatro modos de conducción predefinidos: Comfort, Sport, Eco y Neutral. Dichos modos alteran el funcionamiento del motor, la asistencia de la dirección, el sistema 4 Control, los amortiguadores y el climatizador. Además, hay un quinto modo (Perso) en el que se pueden configurar los distintos parámetros de manera individual.
El Talisman dispone de una silueta francamente conseguida, con una configuración de tres volúmenes o mejor dicho de dos volúmenes y medio dada la cortedad de la tapa del maletero. El personal frontal adopta lógicamente la identidad de la marca de los últimos modelos, es decir el rombo del logotipo de generosas proporciones situado en el centro de una calandra de 5 lamas cromadas, pero que ninguna tiene la misma longitud para conformar así una parrilla muy elaborada y exclusiva. La lama superior, en sus extremos se dirige hacia los estrechos faros de tecnología Full Led, de cuyos extremos exteriores parte en forma de boomerang la luz de día. Bajo la original calandra nos encontramos la toma de aire central, a cuyos extremos se encuentran en un no menos generosos cubículo, los antiniebla. El capó está muy elaborado y en él se han tallado distintas formas que personalizan aún más esta parte delantera. Lateralmente los rasgos más significativos quizás sean las tres ventanillas que conforman la zona acristalada, las grandes y bonitas llantas de 19” y las generosas dimensiones, pues la longitud llega hasta los 4,85 m. de largo y gracias a sus cortos voladizos, la distancia entre ejes se sitúa en los 2.81 metros, lo que ya deja adivinar un habitáculo especialmente amplio. La amplia e inclinada luneta trasera se “come” parte de la tapa del maletero con lo que, como ya hemos dicho, ésta queda muy corta. El panel vertical está dominado por los horizontales y grandes grupos ópticos, también con tecnología led, que siempre están encendidos para situar mejor el coche aunque sea de día. También el paragolpes está muy esculpido y en su parte más baja, a cada extremo, se sitúan las salidas del escape con marco cromado y de forma rectangular.
Si el exterior está francamente conseguido y como decimos, denota un paso adelante dentro de esta categoría en Renault, el interior sigue esa misma línea, sobre todo en esta versión Initiale París, y sobre todo puede presumir de un espacio amplio y muy aprovechable. De entrada, digamos que el salpicadero está algo inspirado en el Espace, en lo que se refiere al propio cuadro de instrumentos y a la consola central con su gran pantalla táctil vertical de 8,7”. El diseño en general del salpicadero es más bien sencillo, pero no exento por ello de cierta elegancia, sobre todo en el lado del copiloto en cuyo frontal se aprecian las decorativas costuras de la piel y las inserciones en imitación a madera noble. Las salidas de aire son de grandes dimensiones, sobre todo las que “escoltan” a la pantalla, que por cierto “absorbe” la mayoría de las funciones auxiliares, ya que bajo ella solo se sitúan los mandos del potente climatizador. El cuadro en su parte central solo tiene el cuentavueltas y a cada lado los indicadores complementarios, ya que la velocidad se puede ver en el centro del cuentarrevoluciones y en la pantalla transparente, head up display, que se despliega sobre el cuadro, que también ofrece las señales de tráfico y el sistema de cambio de carril. Los asientos son muy confortables y sujetan bien el cuerpo, disponiendo de calefacción y ventilación, además de una interesante innovación, la incorporación de la tecnología denominada Cover Carving Technology: se trata de una primicia mundial: una nueva carcasa semi rígida, resistente a la vez que flexible y ligera que se integra en el respaldo de los asientos delanteros. Ya hemos dicho lo fácil que es adaptarse a la posición de conducción, por lo que hacer cientos de kilómetros sin fatigarse no plantea el más mínimo problema, pues la palanca de cambios queda muy a mano como ocurre con los pocos interruptores auxiliares. Las plazas traseras disponen de un espacio para las piernas envidiable y de no ser por la configuración para dos personas, puede acoger perfectamente a tres sin sentir apreturas. El maletero tiene una buena capacidad de 515 litros, que llegan a los 608 litros contando el espacio bajo el piso, a los que hay que sumar 25 litros de la capacidad de los huecos repartidos por todo el habitáculo. Un habitáculo muy acogedor que dispone entre otros detalles de luz ambiental en el salpicadero, que puede cambiar de color a voluntad.
El equipamiento es muy completo y se puede contar con un sinfín de elementos de ayuda a la conducción, a la seguridad, el confort y la conectividad, tal es el caso, que en este último apartado, se incorpora el sistema R-Link 2, que entre otras muchas actividades puede funcionar como una tablet, con zoom con los dedos, recorrido por las páginas etc. R-LINK 2 pilota la tecnología Multi-Sense y las ayudas a la conducción además de las funciones clásicas: navegación, audio y climatización…Los botones de acceso directo, la rueda de la consola central y los mandos adicionales en el volante completan la pantalla táctil y proporcionan una manipulación del sistema totalmente segura. Las funciones favoritas y las más utilizadas están al alcance de la mano gracias a las páginas de inicio personalizables que recurren a widgets (ventanas funcionales). Además, es fácil acceder en un clic a los reglajes de conducción y de vida a bordo favoritos. Basta con memorizarlos en un perfil personal que incorpora las preferencias personales relativas, como por ejemplo al idioma, la posición del asiento (Incluidos los masajes), a los retrovisores exteriores, a las emisoras de radio, al ambiente luminoso……Es también digno de destacar el excelente equipo de sonido Bose, con el que estaba equipado, con nada menos que trece altavoces.
Además, el Talisman cuenta con los elementos más habituales en este segmento, como el avisador de cambio de carril, el radar delantero anticolisión, ayuda del aparcamiento, cámara trasera, BLIS en los retrovisores exteriores, etc.