Sevilla de noche también tiene un color especial. Sus edificios repletos de historia bañados de una iluminación tenue, sus árboles con tonalidades diferentes a las que se aprecian con la luz del día, la brisa nocturna que nacedel Guadalquivir… Las noches en la capital hispalense tienen algo mágico y más, aquellos días de luna llena, en los que se respira un ambiente especial. Vincci Hoteles propone vivir esas veladas al máximo en la terraza de Vincci La Rábida 4*, un espacio que cuenta con unas vistas inmejorables de la ciudad, de la catedral y, por supuesto, de la luna que aparece radiante en el cielo sevillano. “Las Noches de Luna Llena”, que empezaron a desarrollarse en la azotea del establecimiento en junio y se han celebrado durante todo el verano coincidiendo con el plenilunio, tendrán lugar por última vez este verano del 12 al 15 de septiembre permitiendo disfrutar de esta experiencia única, en un escenario de ensueño, deleitándose con la mejor gastronomía.
Durante todos estos días, el restaurante “El Mirador de Sevilla”, situado en la propia terraza, ofrecerá un menú especial compuesto por cuidadas especialidades culinarias como la Crema de Salmorejo de Mango, con virutas de Beicon y Tartar de Langostinos y Papaya y el Solomillo Ibérico a la parrilla, Ajos Tiernos y emulsión de Boniato con Anís Estrellado. El embrujo del ambiente envolverá a las mejores opciones gastronómicas mientras se puede observar el paisaje de la capital andaluza iluminado por la luna.
Todo ello, en el ambiente acogedor y distinguido de este hotel, el predilecto de los toreros, diseñado a partir de una casa palacio del siglo XVIII y decorado con líneas típicas sevillanas, proporcionándoles elegancia, calidez y confort.
El alojamiento dispone de 104 habitaciones, cuya decoración sigue el mismo patrón que la arquitectura del edificio, proporcionándoles elegancia, calidez y confort. También cuenta con un luminoso y acogedor patio interior, típico andaluz, en el que se puede disfrutar de unos momentos de tranquilidad en un entorno incomparable. Su ambiente, su localización y su gastronomía invitan a disfrutar, más si cabe, de la capital hispalense.