Pablo Isla explicó en su presentación que el trabajo conjunto durante esta década respalda “el compromiso de Inditex con el empleo estable y de calidad, así como la promoción de la igualdad en el ámbito laboral”.
“Nuestros empleados son el motor de nuestro desarrollo”
Isla aseguró que “en Inditex lo primero son las personas, ya que son el motor de nuestro desarrollo” y subrayó la fuerte generación de empleo y atracción de talento del Grupo, que en 2009 –año de la firma del acuerdo– contaba con 92.000 empleados en plantilla y en la actualidad supera las 174.000 personas, de 154 nacionalidades.
A este respecto, recordó que en Inditex existe paridad salarial entre hombres y mujeres (con una brecha positiva del 0,8% a favor de las mujeres) y subrayó que la compañía dedicó más de 2 millones de horas de formación a 146.000 profesionales en el último ejercicio. “Estamos convencidos de que siempre hay lugar para la mejora”, señaló, y, para ello, “seguiremos esforzándonos en impulsar valores como el trabajo en equipo, la humildad, la innovación, la diversidad y el compromiso”.
El presidente de Inditex reconoció la implicación de la secretaria general de UNI Global Union, Christy Hoffman, y del director general de la Organización Internacional del Trabajo, Guy Ryder, y agradeció la especial implicación de los representantes de Comisiones Obreras (CCOO) y de la Unión General de Trabajadores (UGT) “para trabajar conjuntamente a favor de nuestros más de 174.000 empleados”.
La secretaria general de UNI Global Union, Christy Hoffman, afirmó que “reconocemos los logros conseguidos gracias a este acuerdo y esperamos reforzar nuestra colaboración en los próximos años. Inditex es un líder en materia de responsabilidad corporativa y, juntos, continuaremos desarrollando los valores que hoy conmemoramos para asegurar el cumplimiento y respeto de los derechos de los trabajadores en cualquier lugar”.
El director general de la OIT, Guy Rider, representado en el acto por Joaquín Nieto, director de la oficina de la OIT en España, se sumó a estas reflexiones haciendo hincapié en la relevancia de este tipo de acuerdos globales.
Los secretarios generales de Servicios de Comisiones Obreras, José María Martínez, y UGT, Miguel Ángel Cilleros, y el presidente del sindicato estadounidense Retail, Wholesale and Department Store Union (RWDSU), Stuart Appelbaum, analizaron como caso de éxito la aplicación del acuerdo en Estados Unidos. Todos ellos coincidieron al destacar la importancia de los sindicatos locales a la hora de adaptar en cada mercado los principios sustentados en un convenio global de estas características.
Para el representante de Comisiones Obreras, “conmemoramos un acuerdo que ha sido útil para los intereses de Inditex y de sus trabajadoras y trabajadores en los países en los que opera la empresa. Pero no solamente eso. También reafirmamos que el diálogo social, global y nacional, entre la empresa y los sindicatos es la herramienta más adecuada para abordar sus relaciones en una economía en transformación”. El portavoz de UGT manifestó que “la aplicación del acuerdo Inditex-UNI Global Union en todas las tiendas y marcas del Grupo en EEUU ha permitido que otras empresas del país entiendan que la sindicalización de sus trabajadores, un marco de relaciones laborales consolidado y unas buenas condiciones de trabajo son compatibles con conceptos como competitividad, rentabilidad y crecimiento aplicados a la empresa”. Por su parte, el presidente de RWDSU recalcó que “los trabajadores de Zara en Nueva York percibieron el poder de este acuerdo global de primera mano. Marcaron una tendencia positiva para los trabajadores de la industria en Estados Unidos –y lo hicieron a través de un proceso justo del cual otras compañías deberían aprender y seguir. El acuerdo ha cambiado la vida de miles de trabajadores -al haber mejorado sus trabajos, sus salarios y sus beneficios- e igualmente ha cambiado el sector del retail”.