De semáforos al cielo. El 5G y la comunicación de los vehículos a tiempo real se asociaba hasta ahora a entornos urbanos, donde SEAT y Telefónica llevaron a cabo la primera fase del proyecto, con dispositivos integrados en la infraestructura como cámaras, señales luminosas y sensores infrarrojos. “Hemos visto como el coche es capaz de comunicarse en ciudad con su entorno y ahora también en zonas rurales. En esta prueba piloto incorporamos un dron, que envía la información a la red celular y ésta al vehículo, y el conductor tiene la información en el cuadro de instrumentos”, asegura César de Marco, responsable de 5G Connected Car de SEAT.
30 veces más rápido que nuestros ojos. El ser humano tarda unos 150 milisegundos en reaccionar al tacto, la vista y el olfato. Con la futura conectividad 5G, el tiempo de reacción desde que se detecta un obstáculo hasta que se comunica con el coche es de 5 milisegundos. “Gracias a esta tecnología celular, que ya tiene características 5G, podemos obtener una baja latencia y detectar a tiempo real la presencia de ciclistas o vehículos en la carretera”, asegura de Marco. Así funciona el sistema:
Tecnología que salva vidas. “Lo que queremos es poner la tecnología al servicio de la seguridad en carretera”, comenta de Marco. Más de la mitad de las muertes por accidentes de tráfico son de los usuarios más vulnerables: ciclistas, peatones y motociclistas. En Europa, 2.100 ciclistas mueren al año y 250.000 resultan heridos. “Los drones van a poder proteger zonas de baja visibilidad o un difícil acceso”, concluye César de Marco. Con la futura implementación del 5G se podrían reducir un 69% el riesgo de accidentes, según las asociaciones automovilísticas internacionales de 5G (5GAA).