Por aquel entonces, Volkswagen escribió acerca del nuevo modelo: "El Golf ofrece el máximo espacio útil y seguridad. Ha sido configurado para la funcionalidad sin compromisos. Su baja línea de cintura le da al conductor una visión clara y el capó inclinado garantiza que la carretera en frente del vehículo esté siempre a la vista. La luna trasera baja hace que la marcha atrás sea muy fácil". Todo ello sigue siendo aplicable hoy en día.
Al igual que con las siguientes generaciones del Golf, la primera generación era también el reflejo del progreso técnico del momento y de las tendencias automóviles de su tiempo. Por ejemplo, Volkswagen dinamizó el segmento con la introducción del primer Golf GTI (1976). En 1979, Volkswagen lanzó el Golf Cabriolet - por un tiempo, el descapotable más vendido del mundo -, que fue una bocanada de aire fresco para esta clase de vehículos, que en ese momento ya eran comúnmente conocidos como Clase Golf. Incluyendo los derivados, como el Cabriolet y el Jetta (que por aquel entonces tenían un diseño idéntico), se vendieron 6,99 millones de unidades en todos los rincones del mundo - el Golf había demostrado ser un digno sucesor del Beetle.