El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha declarado: «La igualdad en todas sus formas es un valor fundamental de la Unión Europea. Desde el primer día de la Comisión Juncker, me comprometí a reflejarlo en esta institución, con la promesa de aumentar la participación de las mujeres en la dirección intermedia y alta con un objetivo del 40 % para el 1 de noviembre de 2019. Hoy me siento orgulloso de haber superado nuestro objetivo. Me enorgullece nuestra labor hasta llegar aquí, pero debemos seguir avanzando. Igualdad es igualdad, ni más ni menos».
El comisario Günther H. Oettinger, responsable de Presupuesto y Recursos Humanos, ha declarado: «Las investigaciones ponen de manifiesto que las organizaciones con diversidad de género obtienen mejores resultados. Estoy muy orgulloso de que, en la Comisión, más del 40 % de nuestros directivos sean ya mujeres. Esto garantiza puntos de vista diversos en los debates y en las decisiones que tomamos en beneficio de los 500 millones de ciudadanos de la UE».
Los progresos más impresionantes se han logrado en el escalafón más alto de la organización, en el que las directoras generales representan actualmente el 38 % del total, frente al 14 % al principio del mandato, lo que supone un incremento del 170 %. En el escalafón de directores generales adjuntos, las mujeres ocupan actualmente el 40 % de los puestos, frente al 8 % en noviembre de 2014. lo que supone un aumento del 400 %.
Además de un compromiso firme al más alto nivel político, este avance sucede a una serie de medidas que la Comisión adoptó desde el inicio de su mandato:
Esto forma parte del programa más amplio de la Comisión en materia de igualdad de género. El Plan de acción 2018-2019 para combatir la brecha salarial entre hombres y mujeres prevé, entre otras iniciativas, acciones para romper el techo de cristal mediante la financiación de proyectos dirigidos a mejorar el equilibrio de género en las empresas en todos los niveles de gestión, y a animar a los gobiernos y a los interlocutores sociales a mejorar el equilibrio de género en la toma de decisiones.