Ebury también espera una ampliación del programa TLTRO (operaciones de refinanciación a largo plazo) para ofrecer préstamos bancarios baratos, lo que puede implicar que el BCE anuncie condiciones mucho más generosas sobre los préstamos para los bancos nacionales (siempre y cuando sean un poco más favorables para las pequeñas y medianas empresas, que serán las más afectadas por el virus). A su juicio, el alivio temporal en forma de suspensión de la deuda podría ser una de las formas de lograrlo.
La entidad financiera considera que el debate sobre la flexibilización regulatoria para los bancos que faciliten el crédito a las pequeñas y medianas empresas o incluso la concesión de préstamos específicos, será más útil para la economía que los recortes de los tipos de interés o una expansión cuantitativa adicional. En este sentido, espera que la presión sobre los gobiernos europeos en la reunión del BCE sea más fuerte que nunca para que suavicen las políticas fiscales.