Ante esta situación, es importante que haya concreción en las propuestas y que se alcance un acuerdo lo antes posible. “Hay muchas empresas familiares que son medianas o pequeñas y que tienen una menor capacidad de resistencia, por lo que su supervivencia puede depender de conseguir esa prórroga de las ayudas”, asegura Jori. Para el presidente de ASCEF, la empresa familiar mantiene su compromiso con el empleo y el territorio “pero la situación empieza a estar al límite y hay mucha incertidumbre sobre lo que ocurrirá los próximos meses”.
Las empresas familiares, que en Catalunya suponen el 88,3% de la totalidad de las empresas privadas, contribuyen con el 69% del Valor Añadido Bruto (VAB) y generan el 76% de los puestos de trabajo privados, creen necesario que los ERTE se mantengan en las mismas condiciones que hasta ahora, al igual que las bonificaciones a las cotizaciones de la Seguridad Social.
Por otra parte, ASCEF también pide al gobierno que el pago a los trabajadores sea mucho más eficiente que hasta la actualidad, evitándose los retrasos y solucionando los actualmente existentes.