En este artículo vamos a tratar de explicar tres ideas básicas pero muy importantes sobre el concurso de acreedores:
Qué es un concurso de acreedores
El concurso de acreedores está formado por una serie de actuaciones que pretenden solucionar la situación de insolvencia del deudor, ya sea renegociando la deuda para que el deudor pueda seguir con su actividad o procediendo a la liquidación de los bienes. En ambos casos siempre se cuenta con la supervisión de un juez.
Un concurso de acreedores lo puede presentar un particular, un autónomo o una empresa. El fin de este procedimiento es intentar mantener la actividad económica del solicitante, para lo cual deberá aportar suficiente y fidedigna documentación.
El artículo 2 del TRLC en sus apartados 1, 2 y 3 expone claramente lo siguiente:
Para empezar este proceso judicial es necesario contar con abogado y procurador. Por eso es conveniente acudir a un despacho de abogados con experiencia y años de oficio. El concurso es un periplo judicial en el que nos jugamos nuestros bienes actuales, por pocos que queden, y, por lo tanto, nuestro futuro.
Fases del concurso de acreedores
Cómo saber si una empresa está en concurso de acreedores
Entrando en la web del Registro Público Concursal (https://www.publicdadconcursal.es/concursal-web/afectado/buscar) que recoge todos aquellos datos que han sido publicados directamente por los Juzgados de lo Mercantil, los Registradores Mercantiles, los Notarios, los Administradores Concursales, Cámaras de Comercio y por los registros públicos en los que se realicen los asientos previstos en la Ley Concursal.
Por último, debemos insistir en que en un concurso de acreedores es vital ir cumpliendo puntualmente los plazos del procedimiento. Por eso, contar con el asesoramiento de firmas como esta de abogados en Valencia, que también tiene oficinas en las principales ciudades de España, es garantía de un buen asesoramiento y una hábil dirección jurídica de los concursos de acreedores.