Viernes 22 de enero de 2021
El proceso de aprovisionamiento de la vacuna contra la COVID-19 que ha seguido Andorra se está llevando a cabo, por una parte, mediante el proyecto COVAX promovido por la Organización Mundial de la Salud para un acceso equitativo de las vacunas en todo el mundo, en el marco del cual aún no se han recibido vacunas. id:67373
La campaña de vacunación en el Principado de Andorra se ha iniciado este pasado miércoles 20 de enero, después de que llegaran al país las primeras 1.000 dosis de la vacuna de Pfizer / BioNTech, procedentes del Reino de España. La primera fase de la campaña de administración de vacunas se dirige a residentes de centros sociosanitarios y profesionales de la salud, así como también a trabajadores sociales que están en primera línea. El pasado jueves llegó al país una nueva remesa con 1.000 vacunas más que servirán para administrar la segunda dosis a las primeras mil personas y lograr así la inmunidad frente al virus SARS-CoV-2.
El proceso de aprovisionamiento de la vacuna contra la COVID-19 que ha seguido Andorra se está llevando a cabo, por una parte, mediante el proyecto COVAX promovido por la Organización Mundial de la Salud para un acceso equitativo de las vacunas en todo el mundo, en el marco del cual aún no se han recibido vacunas. Y, por otra parte, a través de los acuerdos bilaterales internacionales, que siguen las vías previstas para que los estados terceros europeos (países del Espacio Económico Europeo y pequeños países situados en el corazón de Europa -Andorra, Mónaco, San Marino y Ciudad del Vaticano-) puedan recibir la vacuna al mismo ritmo y de manera coordinada con el resto de estados de la Unión Europea.
El principal objetivo en una situación de pandemia mundial es que la inmunidad de grupo se pueda lograr de manera equilibrada mediante un esfuerzo conjunto y coordinado de todos los países afectados, evitando así que haya regiones en las que el virus pueda hacer mella en personas sensibles pudiéndose seguir difundiendo.
Es en este marco que Andorra ha llegado a acuerdos bilaterales con España y Francia como única vía posible actualmente para poder aprovisionarse de la vacuna contra la COVID-19, ya que de momento no ha podido negociar de manera directa con los laboratorios farmacéuticos. En efecto, a estas alturas los acuerdos bilaterales son la única vía posible de aprovisionamiento para los estados terceros, ya que los miembros de la Unión Europea han acordado con los laboratorios farmacéuticos, de manera previa, que los estados terceros podrán recibir la vacuna adquiriéndola mediante acuerdos bilaterales con los países miembros.
De este modo, se ha acordado que el aprovisionamiento de la vacuna de Pfizer / BioNTech llegará a través de España y que las vacunas de la compañía Moderna llegarán a través de Francia. Ambos acuerdos ponen de manifiesto que no se generará un lucro económico para ninguna de las dos partes, sin que ello suponga un perjuicio para el país de la Unión Europea que suministra vacunas a los estados terceros. Además, también se especifica que las dosis suministradas irán en consonancia con el porcentaje de vacunación alcanzado por los países de la UE.
El entendimiento bilateral con España y Francia también forma parte de las buenas relaciones transfronterizas que tiene Andorra con los países vecinos. Fruto de ese buen entendimiento, Andorra se ha convertido en un polo dinamizador económico y social del Pirineo oriental. Buena prueba de ello son las prestaciones sanitarias constantes que ha proporcionado Andorra durante la situación actual de pandemia, así como también con anterioridad y desde hace muchos años.
Durante la segunda ola de la COVID-19, desde Andorra se han realizado más de 3.800 pruebas diagnósticas de TMA a los residentes del Alt Urgell y, además, los trabajadores transfronterizos han tenido acceso gratuito a estas pruebas. También se ha asistido a pacientes en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Nuestra Señora de Meritxell y desde hace ya años se ofrece una prestación ininterrumpida del servicio de diálisis, radiología o endoscopia a los residentes del Alt Urgell en el hospital andorrano.
Además, los trabajadores españoles fronterizos han accedido a la prestación por suspensión temporal de los contratos de trabajo y reducción de jornada laboral, de la cual el Gobierno de Andorra se hace cargo de hasta un 75% del salario. Finalmente, la cooperación entre ambos territorios, incluye el tratamiento de un número considerable de residuos urbanos de la Cerdanya en el horno incinerador de Andorra, al mismo precio que se aplica a nivel nacional andorrano y asumiendo gratuitamente una parte de los gastos de transporte.
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