Consejera y alcaldesa han coincidido en resaltar que la adhesión al ‘Compromiso Blanco’ supone añadir un “plus de sostenibilidad” para mejorar la competitividad de los productos agrícolas en los mercados europeos, al reforzar la apuesta del sector por la preservación del medio ambiente y un uso sostenible de los recursos naturales.
En este sentido, Crespo ha señalado que el pilar de esta iniciativa radica en el “compromiso de todos” por una agricultura sostenible social y medioambientalmente.
“Junta y ayuntamientos nos comprometemos a ayudar a nuestros agricultores a seguir dando pasos para mantener el entorno natural del municipio en las mejores condiciones y a apostar por la economía circular, el reciclaje y una eficaz gestión de los residuos”, ha incidido.
A este respecto, la consejera ha puesto el acento en que la colaboración con las entidades locales es “vital” para lograr los objetivos del ‘Compromiso Blanco’, porque conocen las singularidades de cada localidad “y al ser la administración más cercana, puede desarrollar una campaña informativa más directa y eficaz”.
Por su parte, la alcaldesa de Motril ha hecho hincapié en la colaboración institucional para el desarrollo de proyectos como este, que suponen un “plus de calidad” para los productos agrarios que se cultivan en invernaderos de la localidad “por proceder de campos limpios”. “Protocolos como este son muy importantes para nuestro sector agrario”, ha enfatizado.
Por último, la consejera ha remarcado que iniciativas como el ‘Compromiso Blanco’ vienen a reflejar los beneficios y las ventajas de que agricultura y medio ambiente confluyan en una misma consejería, ya que es el resultado del trabajo coordinado entre dos direcciones generales: Produccion Agricola y
Ganadera y Calidad Ambiental y Cambio Climático. “Esto nos permite llevar a cabo actuaciones que contribuyen a una agricultura andaluza cada vez más sostenible e innovadora”, ha concluido, antes de recordar la apuesta inversora de la Junta para la restauración y limpieza de cauces en la zona.
Dos fases
La campaña ‘Compromiso Blanco’ se divide en una fase de identificación a ejecutar por los ayuntamientos, con visitas de campo para recopilar información, que luego remiten a la delegación territorial, e informar a los titulares de las explotaciones de sus obligaciones como productor de residuo y las distintas opciones para su gestión. Y una segunda fase de inspección a ejecutar por las delegaciones territoriales, en la que se analiza la información recibida y se priorizan actuaciones de inspección en base a un análisis de riesgos; si se evidencian hechos sancionables, se abre el correspondiente expediente.
No obstante, la prioridad es informar sobre este protocolo y su contenido tanto entre las empresas agrícolas como sobre el conjunto de la ciudadanía, para fomentar un adecuado conocimiento por parte de los agricultores, personal técnico, cooperativas y empresas de comercialización hortofrutícolas de las bondades de la correcta gestión de los residuos plásticos agrícolas, recurriendo a los centros autorizados de recogida.