Esta respuesta se produce cuando nos enfrentamos a un obstáculo que parece difícil de superar, provocando reacciones bioquímicas debidas a la producción de hormonas particulares.
Estamos diariamente sometidos a estímulos que sobrecargan nuestro sistema nervioso, causando, en la mayor parte de los casos, un agotamiento que lleva a una drástica disminución de las defensas inmunitarias y a la aparición de síntomas emotivos, fisiológicos y físicos.
Para evitar que esto ocurra, es importante dedicar parte de nuestra jornada al desarrollo de actividades que nos agradan o a la relajación psico-física.
Uno de los mejores modos para desconectar de nuestra atareada rutina, pero sobre todo, para combatir la acumulación del estrés sobre nuestro cuerpo y sobre nuestra mente, es el quiromasaje.
A día de hoy es fácil encontrar quiromasajistas cualificados. Esto es posible gracias a la amplia variedad de escuelas y academias en las que se puede formar siguiendo un curso quiromasaje.
La sociedad moderna, con su ritmo rápido y caótico, no da espacio a quién no se mueve a la misma velocidad.
Esta permanente competición nos obliga a tener que afrontar nuevos problemas día a día, favoreciendo la acumulación de estrés muscular y sensaciones de malestar general.
Relajarse es seguramente la primera cosa que se debe hacer para combatir el estrés, pero existen varias opciones que se pueden realizar.
La meditación y el yoga, por ejemplo, nos permiten encontrar un equilibrio entre mente y cuerpo, a través de la ejecución de una correcta respiración y de movimientos particulares del cuerpo.
Alternativas buenas de la meditación pueden ser una sauna purificante, o un relajante baño caliente con aceites esenciales.
El masaje es, muy probablemente, uno de los métodos más antiguos utilizados por la humanidad para curar los dolores musculares.
Con el paso de los años, el desarrollo científico y médico ha llevado a un conocimiento mayor de la anatomía humana y del funcionamiento de nuestro cuerpo, permitiendo, como consecuencia, el desarrollo de nuevas técnicas especializadas en la manipulación de varias partes del cuerpo.
El quiromasaje, técnica que toma su nombre en España gracias al Doctor Vicente Lino Ferrandiz García, tiene efectos beneficiosos sorprendentes en la lucha contra el estrés.
Las diferentes técnicas del quiromasaje consiguen mejorar la circulación sanguínea, favoreciendo un flujo de sangre mayor en nuestros tejidos musculares que reducirán la hipertensión muscular.
Además del sistema circulatorio, el quiromasaje tiene una gran influencia también sobre el sistema linfático, el cual viene ayudado, a través de la manipulación realizada en puntos particulares, para eliminar los desechos acumulados en nuestro cuerpo.
Obviamente, también el sistema nervioso se beneficia de la aplicación de estas técnicas, ya que, además de remodelar nuestra piel y nuestros músculos, a través de la estimulación del aparato nervioso, vienen favorecidas la sensación de relajación y el alcance del sueño.
La mejora general de nuestras condiciones físicas y mentales influye positivamente sobre nuestras emociones, provocando como consecuencia un incremento de la felicidad y del humor.
Cuando se aplica como tratamiento contra el estrés, el quiromasaje se dirige usualmente a la espalda del paciente. Realizando movimientos a un ritmo muy lento y con una intensidad profunda, y así, de esa manera, alcanzar todas las cadenas musculares.