Los beneficios de explotación de la Compañía para el primer trimestre del año fiscal –comprendido entre el 1 de abril y el 30 de junio de 2016– han alcanzado los 266.800 millones de yenes (2.342,50 millones de euros) reflejando un aumento del 11,5% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Esta cifra es el resultado de varios factores, como los esfuerzos en la reducción de costes de la Compañía, el incremento de beneficios que ha supuesto el cambio en los volúmenes de ventas y en el model mix, y un descenso en los gastos destinados a ventas, servicios generales y de administración que incluyen los relacionados con las mejoras de calidad. Este crecimiento se ha producido a pesar de un tipo de cambio desfavorable y del impacto del terremoto de Kumamoto, en Japón.
El beneficio antes de impuestos para el primer trimestre del año fiscal se ha situado en los 288.400 millones de yenes (2.532,15 millones de euros), lo que supone un aumento de 2,2% respecto al mismo periodo del año anterior. El beneficio neto del periodo atribuible a los accionistas de la Compañía en este periodo ha sido de 174.600 millones de yenes (1.527,72 millones de euros), un 6,1% menos que el mismo periodo del año anterior, debido principalmente a un mayor gasto destinado al pago de impuestos. Las previsiones de los resultados financieros consolidados para el presente año fiscal, que finalizará el 31 de marzo de 2017, se mantienen sin cambios respecto a las ya anunciadas con anterioridad. Los dividendos generados en este primer trimestre del año fiscal serán de 22 yenes por acción, y se espera que al final del presente ejercicio, que finaliza el 31 de marzo de 2017, alcancen los 88 yenes por acción.