En su ponencia, Miguel Sánchez Arbeo y Sergio Figuerola destacaron la importancia de los criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG, por sus siglas en inglés) y cómo estos se han convertido en un requisito imprescindible para poder competir en el mercado. Los expertos de BCG mostraron que los parámetros ESG, y en especial su dimensión medioambiental, afectan en la toma de decisiones debido a la creciente presión de reguladores e inversores.
De acuerdo con estudios previos de BCG, las compañías más avanzadas en su acción climática obtienen significativas ventajas competitivas: desde un aumento de los ingresos y una mejor retención del talento empresarial, hasta una reducción sus costes operativos y una mejor gestión de riesgos. En este sentido, los líderes en sostenibilidad consiguen condiciones de financiación más ventajosas y a largo plazo logran un mejor retorno para el accionista que sus competidores. “El aumento de ingresos y el ahorro de costes operativos son dos consecuencias destacadas de la aplicación de criterios ESG. Se observan mayores tasas de crecimiento en las ventas de productos y alternativas "verdes", mientras que se espera que otros vean un auge de tecnologías similares en los próximos años”, aseguraron Sánchez Arbeo y Figuerola.
Como cierre del evento, ambos expertos señalaron que el calentamiento global supondrá una transformación radical de las empresas, por lo que se requiere una actuación inmediata a través de una estrategia climática con objetivos claros y definidos. Para ello, estiman que “el impulso para adoptar medidas contra el cambio climático es cada vez más fuerte, haciéndose necesarios instrumentos que garanticen su efectivo cumplimiento“. Algunos de estos son la reducción de la huella global de emisiones, la divulgación de los niveles de cumplimiento ESG de las empresas, la creación de comités de recopilación y evaluación de datos sobre el impacto operativo en toda la cadena de valor en base a criterios ESG, y la evaluación temprana de los proveedores.