Se trata de un edificio destinado a uso residencial, compuesto de una planta baja y cuatro plantas superiores cuya reestructuración dará lugar a la creación de ocho apartamentos destinados al uso turístico. En la planta baja se ubicará la recepción-conserjería y dos apartamentos turísticos, uno de los cuales será adaptado a personas con movilidad reducida. En cada una de las plantas primera, segunda y tercera se situarán dos apartamentos, y en la planta bajo cubierta se ubicarán las instalaciones de servicios ocultas bajo el faldón de cubierta.
Ubicación estratégica
El edificio mejorará la oferta hotelera y la actividad turística en una zona situada un enclaves estratégico de la ciudad, tanto en el ámbito cultural como de ocio y comercial. Una iniciativa que apoya el Ayuntamiento de Madrid, dado que considera necesario que los edificios sin uso o deteriorados se incorporen a nuevos usos con el fin de generar actividad económica y social, crear puestos de trabajo y atender la demanda del sector turístico en una de las zonas más visitadas de la ciudad.