Desde Fundación FEINDEF, compartimos los datos de dicho informe, que pone en valor la resiliencia y capacidad de un sector que, a pesar de la crisis derivada de la pandemia de la COVID, ha sido capaz de mantener estable el empleo durante 2020, tanto directo como indirecto e inducido, y de dar respuesta a las distintas necesidades sociales y sanitarias a las que se ha enfrentado la sociedad española.
La industria de Defensa y Seguridad tiene un impacto en la generación de un empleo directo de 24.766 trabajadores. Estos profesionales se caracterizan por ser perfiles muy cualificados que exigen realizar un gran esfuerzo a la hora de mantener el talento y que hace que su salario se sitúe en torno a los 40.000€, más de un 80% superior al de la media nacional.
A este empleo directo hay que sumar el indirecto que esta industria genera a su alrededor para satisfacer las necesidades de la cadena de suministro, y el inducido como respuesta al gasto generado por los empleos directos e indirectos, lo que deja una cifra total de 95.696 empleos en el sector de la industria de Defensa y Seguridad.
Estas cifras son un claro ejemplo del importante papel de la industria de Defensa y Seguridad a la hora de impulsar la economía española y de favorecer una cohesión territorial que permita a un gran número de regiones despobladas su revitalización.