Motor

Honda HR-V 1.6 DTEC

El SUV compacto, espacioso, equipado y además tipo coupé

Mariano García Viana | Martes 06 de septiembre de 2016
El mercado cada día ofrece más SUV o todocamino compactos que, con un tamaño contenido de alrededor de los 4 metros y medio, ofrecen un espacio más que suficiente y una manejabilidad más que aceptable, pero de todos ellos el HR-V, ofrece con un menor tamaño (4,3 metros), un espacio y un maletero muy aprovechables, además de un diseño francamente original inspirado en un coupé.

Como afirma Masaki Kobayashi, jefe del proyecto del nuevo HR-V, cuando se encargó de diseñarle, su objetivo principal era diferenciarle claramente de su hermano mayor, el CR-V, no conformándose con hacer un SUV de menor tamaño, sino dotándole además de una personalidad propia e innovadora y dirigido preferentemente a un público joven que quiere un coche ágil y ligero, pero con suficiente espacio y versatilidad. El resultado ha sido más que satisfactorio, pues se ha conseguido un diseño desde luego de SUV, sobre todo por su altura con respecto al suelo, 1.605 mm., pero gracias a su inclinada trasera o más bien a la línea de las ventanillas traseras, en cuyo extremo se oculta el abridor de esa puerta, se puede decir que tiene un aspecto de coupé y transmite esa ligereza y agilidad que los diseñadores querían. El frontal esta dominado por dos tonos cromáticos, uno el de la carrocería que incluye los amplios paragolpes y la zona de los antiniebla y otro negro que abarca la parrilla hasta los faros, la entrada de aire principal y el centro presidido por el logotipo de la marca. Una delantera compacta, como lo es el coche en su totalidad y “muy” de Honda. La trasera también se puede decir que es original, con la luneta muy inclinada y unos grandes grupos ópticos horizontales pero que se prolongan hacia abajo formando un triángulo. En definitiva una atractiva, compacta y original carrocería.

El interior tampoco está exento de originalidad y antes de describirlo vaya por delante la excelente calidad de los materiales empleados y los buenos ajustes de todos los elementos. El cuadro está dominado por un gran velocímetro enmarcado por un halo de luz que cambia de color según la forma de conducir, verde para una conducción reposada y “ecológica”, azul para cuando aceleramos de forma más decidida y rojo/naranja cuando se sube de vueltas con rapidez. A la izquierda del velocímetro se sitúa el cuentavueltas y a la derecha el indicador digital del nivel de combustible y los datos del ordenador y los de asistencia a la conducción. La pantalla digital de 7 pulgadas está situada en el propio salpicadero y junto a ella, a su izquierda se encuentra una salida de aire y a su derecha otras de forma horizontal que abarcan toda la longitud del lado del acompañante. La postura ante el volante está bien estudiada y el conductor puede llegar fácilmente a todos los mandos y la visibilidad, debido a la mayor altura del coche que la de un turismo, es muy buena en todas direcciones.

Los asientos, de piel y tejido en la versión probada, en el caso de los delanteros sujetan bien el cuerpo y resultan cómodos, teniendo la particularidad de que bajo ellos está situado el depósito de combustible, para conseguir una doble ventaja, un mejor equilibrio del reparto de pesos en el coche en general y el liberar espacio bajo los asientos traseros y el maletero. Esto permite emplear el sistema Honda Magic Seats en que cada uno de los asientos de la segunda fila, con una división de 60:40, adopte diversas configuraciones para aprovechar al máximo la versatilidad de su espacioso interior a la hora de dar cabida a pasajeros y carga. Este sistema Honda Magic Seats, puede adoptar hasta tres modos a partir de la posición estándar de los asientos. A saber:

Modo funcional: el respaldo del asiento trasero se abate hacia delante mientras que la base del asiento desciende hacia el espacio para los pies de los pasajeros de la parte trasera, de manera que se crea una superficie plana de un máximo de 1.845 mm de longitud.

Modo vertical: la parte delantera de la base de los asientos traseros se eleva y se desplaza hacia atrás, y se coloca en posición vertical, de manera que se consigue una altura de carga de 1.240 mm desde la base hasta el techo, con lo que se pueden transportar objetos de gran longitud detrás de los asientos delanteros.

Modo horizontal: el respaldo del asiento del acompañante delantero se abate hasta adoptar una posición horizontal, mientras que los respaldos de los asientos de la parte trasera se abaten hacia delante de manera que se forma una especie de túnel en el que se pueden transportar objetos de hasta 2.445 mm de longitud.

La capacidad del maletero es otro de los puntos fuertes del HR-V situándose en uno de los de mayor capacidad de su categoría, con 470 litros, con los asientos traseros montados y que pueden llegar a los 1.533 litros gracias al mencionado sistema Magic Seats. Cargar el maletero no requiere levantar mucho los objetos que queremos depositar en él, ya que el borde de carga está situado a 65 centímetros del suelo, que es más bien poco. El equipamiento es bastante completo y en él se incluyen diversos sistemas de ayuda a la conducción, como el avisador de cambio de carril, cámaras en la parte delantera y trasera, avisador de posible colisión frontal, limitador de velocidad inteligente, reconocimiento de las señales de tráfico y un largo y completo etcétera. Pero hay que destacar sobre todo le nuevo sistema de Honda de freno activo en ciudad. Este sistema, que se ha diseñado específicamente para evitar y reducir los accidentes a baja velocidad, utiliza una tecnología basada en un radar láser que examina la carretera por la que avanza el vehículo y acciona automáticamente los frenos en caso de que se detecte un riesgo de colisión inminente. El sistema está concebido para funcionar a velocidades por debajo de los 32 km/h. Si el sistema identifica que existe riesgo de colisión, se produce un frenado previo, además de emitirse señales de advertencia acústicas y visuales, y, finalmente, tiene lugar un frenado autónomo completo para detener el coche. También en el área del infoentretenimiento el HR-V está muy bien equipado y a través de su pantalla multifunción o de las conexiones auxiliares, se pueden manejar diversos sistemas de comunicación y ocio.

El HR-V probado montaba un buen motor diesel de 1.6 litros, capaz de rendir 120 CV a 4.000 r.p.m. y obtener un par de 300 Nm a 3.000 r.p.m.. Un motor que equipa lo último en tecnología diesel que minimizan la fricción, reducen las emisiones y aumentan el ahorro de combustible. Por descontado que incorpora el sistema “common rail”, un turbocompresor de alta eficiencia, un sistema de recirculación de los gases de escape (EGR) de baja presión y una culata de alta turbulencia y gran flujo de admisión. Gracias a un nuevo cigüeñal estilizado, ligero y de gran resistencia y un bloque de motor moldeado a alta presión y estructura abierta fabricado en aluminio, se ha conseguido reducir el peso del motor. Las prestaciones son interesantes para la cifra de potencia y así se pueden anotar 192 km/h para la velocidad máxima y una aceleración de 0 a 100 km/h de 10 segundos y lo que es muy importante, un consumo medio de solo 4 litros a los 100 kms. La caja de cambios, en esta ocasión, era manual de 6 velocidades, con un funcionamiento y unas relaciones muy bien estudiadas para aprovechar la potencia del coche y circular de forma rápida y desahogada con un consumo reducido.

El comportamiento del coche es francamente excelente. La plataforma y la carrocería forman una estructura muy rígida, en la que el 27 % de la misma se ha fabricado con acero de alta resistencia y ofrece una mayor rigidez en las uniones del bastidor. Su carrocería robusta proporciona a la suspensión (montantes MacPherson en la parte delantera y barra de torsión en forma de H en la parte trasera) una base firme que, junto con el centro de gravedad bajo y el balanceo minimizado de la carrocería, contribuye a reforzar la solidez y transmite una gran sensación de seguridad al volante. Además, gracias a un nuevo sistema de dirección asistida electrónica con un motor sin escobillas que se adapta al movimiento, se consigue una mayor sensación de agilidad. Para minimizar el subviraje, la suspensión delantera incluye un centro de giro delantero más bajo para mejorar la estabilidad, mientras que la suspensión trasera cuenta con un centro de giro elevado. De esta manera, se consigue un comportamiento excepcionalmente lineal en la conducción, que hace que el HR-V sea uno de los coches que inspira más confianza dentro del segmento de vehículos crossover a la hora de conducirlo a su máximo nivel. La potencia de frenado es estable y enérgica y está garantizada gracias a los discos ventilados delante y macizos atrás.