Las criptomonedas disponen de su propio algoritmo y se ven modificadas según los intereses de los bancos. Es decir, será el propio algoritmo el que gestionará la cantidad de nuevas unidades emitidas cada año. Una característica destacada a la hora de invertir en criptomonedas es que cuando operas, no puedes modificar o cancelar. Pero sí que podrás ejecutarla de la manera contraria, es decir, revertirla.
Lo primero que debes hacer es darte de alta en una plataforma de criptomonedas donde poder pasar los euros a la criptomonedas. Esto es muy probable que esté sujeto a una pequeña comisión, pero es un paso imprescindible. Existen muchos proveedores de exchanges y ninguno de ellos tiene disponible todas las criptomonedas que existen, ni sus pares. Recomendamos siempre abrirte un perfil teniendo en cuenta que sean exchanges utilizados.
Deberás registrarte y verificar tu identidad para cumplir con la normativa vigente. Así pues, quizás sea algo tedioso, pero será solamente una vez, después ya estará todo listo. Te recomendamos que si el alta la haces en lugares que no te piden muchos datos, desconfía de ello. El ciberdelito no tiene fronteras y en este mundo, mucho menos, así que siempre actúa con sentido común.
Los exchanges funcionan como billeteras hardware en la que metes tus activos y dejas de tenerlos bajo tu poder. Eso sí, está el compromiso de retirarlos cuando tú quieras. Mantén las claves de acceso en total confidencialidad, que nadie más que tú las conozca, así nadie te podrá sustraer nada.
Muchos inversores dejan en los exchanges solo con los fondos para hacer trading. De esta manera, el resto lo mantienen en una "billetera en frío", es decir, offline y a buen recaudo. En consecuencia, ya estás preparado para especular cambiando unas divisas por otras según las tendencias.
Estudia el mercado y si no tienes ganas ni tiempo ahora, también puedes comprar Bitcoin y dejarlo crecer en el tiempo, nada más. Así, cuando te formes un poco ya podrás afrontar operaciones más decididas.
No te dejes llevar por la euforia ni las emociones desmedidas. El mundo de las criptomonedas es muy volátil. El miedo a ver opciones de ganancias y no querer dejarlo pasar, puede dar lugar a grandes pérdidas.
Rodéate de gente que sea experta operando y copia o bien que ellos mismos te ayuden con sus conocimientos. Es muy importante estudiar estrategias que hayan tenido éxito y marcarte una hoja de ruta. Evidentemente, ten claro el gasto máximo que vas a asumir y jamás veas esto como una forma de vida o un trabajo, sobre todo si estás empezando.
Es de novatos creer que algo sube y sube y así hasta el infinito, cuando tarde o temprano vendrá la gran bajada. Por lo tanto, es muy importante saber cuándo parar y recoger beneficios. No trates de hacerte millonario rápido, porque la magia al menos aquí no existe. Empieza a formarte sin dejar de hacerlo, aprendiendo y ganando poco a poco, así llegarás lejos.
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