Las bolsas de la región Asia-Pacífico recogen las ganancias globales de ayer y muestran una tendencia alcista más significativa en el caso del Hang Seng de Hong Kong (+1,7%) y el Shanghai Composite chino (+1,6%). Las subidas son más moderadas, de en torno a un 0,2%, en el Nikkei 225 japonés y el ASX 200 australiano. Una tendencia que contrasta con el signo negativo del Kospi surcoreano (-0,1%) y del Sensex indio (-0,7%).
En Europa, se espera una apertura de las bolsas con signo positivo, en línea con el cierre de ayer, liderado por el CAC 40. El futuro del índice francés sube más de un 1%, mientras que en el resto de la Eurozona se observan avances más moderados de un 0,6% en el caso del IBEX 35 español y de un 0,4% en el DAX 40 alemán.
En renta fija, se observa un comportamiento divergente entre los rendimientos de los bonos soberanos de EEUU y los de Europa. En el mercado secundario estadounidense predominan las compras a lo largo de toda la curva, provocando un descenso de la TIR del Treasury a 10 años de 2,9 pb a un 2,92%, continuando con la senda a la baja tras los máximos desde finales de 2018 registrados el pasado viernes. En los vencimientos a 10 años de la Eurozona, la rentabilidad del Bund alemán aumenta 1,1 pb, la del bono español 1,8 pb y la del italiano 2,5 pb.
El oro inicia la jornada con una revalorización de un 0,3% hasta 1.843 $ por onza, si bien en las últimas dos sesiones una apertura en verde no ha impedido finalizar con pérdidas. El petróleo Brent también muestra una evolución al alza, repuntando su cotización un 2,6% encaminado a revertir la caída de ayer de más de un 3%; así, alcanza nuevamente 105 $ por barril. En el mercado de divisas, el dólar mantiene su cotización relativamente estable frente a la divisa de la Eurozona en torno a 1,05 dólares por euro (+0,1%), consolidado en ese nivel en los últimos 5 días.
El índice de volatilidad VIX del S&P 500 se moderó ayer a 32,99 puntos (-5,06%) tras el fuerte repunte del lunes.
Los precios de fábrica y al consumidor de China aumentaron más rápido de lo esperado en abril, en un contexto en el que los confinamientos por covid-19 afectaron a las cadenas de suministro.
El índice de precios al productor aumentó un 8% interanual, 0,3 pp menos que en marzo pero por encima de las estimaciones del consenso del mercado. Si bien los precios de las materias primas se han moderado desde los máximos provocados por el inicio de la guerra en Ucrania, los costes siguen siendo elevados y han reducido las ganancias de la industria. La política zero covid ha impactado negativamente en los costes operativos, lo que dificulta que las fábricas mantengan la producción, obtengan materias primas y envíen productos terminados.
Por su parte, el crecimiento del IPC se aceleró a un 2,1% interanual (vs. 1,5% el mes anterior), alcanzando la mayor tasa en los últimos cinco meses. Destacó el encarecimiento de los alimentos tras los cierres adoptados en varias zonas para contener la propagación del covid-19, aumentando un 24% interanual los costes de las verduras frescas aumentaron (vs. 17,2% en marzo). A su vez, el repunte de los precios del combustible de un 28% interanual también contribuyó a aumentar los precios al consumidor. De esta forma, el IPC subyacente, que excluye los precios de los alimentos y la energía por su carácter más volátil, se incrementó un 0,9% anual, moderándose tras registrar en marzo un 1,1%.
La Cámara de Representantes aprobó el martes por la noche un proyecto de Ley de gastos de emergencia destinados a Ucrania de más de 40.000 millones de $, que incluye nuevo armamento y asistencia económica y humanitaria. Se trata de una cifra significativamente superior al paquete 33.000 millones de $ que solicitó el presidente Joe Bien el mes pasado. Tras una votación con 368 votos a favor y 57 en contra, la legislación debe ser aprobada ahora en el Senado, previsiblemente la próxima semana.