En el circuito "Arena del Futuro", creado por A35 Brebemi en colaboración con Stellantis y otros socios, se realizan pruebas de campo de la revolucionaria carga eléctrica inductiva dinámica de vehículos eléctricos. id:84704
Tras meses de pruebas en el circuito “Arena del Futuro”, Stellantis, junto con sus socios de proyecto, demostraron hoy en Chiari, Italia, la capacidad de la tecnología DWPT (Dynamic Wireless Power Transfer) de recargar sin cables vehículos eléctricos (EV) al desplazarse sobre carriles de carretera especialmente equipados.
La DWPT es un sistema de bobinas situadas debajo del asfalto que transfieren la energía directamente a coches, camiones y autobuses sin necesidad de que se detengan en estaciones de carga para recargar la batería. Dicha tecnología se puede adaptar a todos los vehículos equipados con un “receptor” especial que transfiere la energía entrante desde la infraestructura de la carretera directamente al motor eléctrico, aumentando la autonomía, a la vez que conserva la carga de la batería del vehículo.
El proyecto piloto de Stellantis y de todos los socios que participan está coordinado por A35 Brebemi, una empresa propiedad de Aleatica, operadora de infraestructuras de transporte globales dedicada a soluciones de movilidad sostenibles e innovadoras. “Nuestro plan estratégico a largo plazo, Dare Forward 2030, se basa en la premisa de aportar ‘libertad de movilidad de vanguardia’ a todas las personas, y este proyecto es la esencia misma de nuestro objetivo como empresa”, comentó Anne-Lise Richard, Head of Global e-Mobility Business Unit de Stellantis. “Al trabajar con este extraordinario grupo de socios, hemos demostrado que la tecnología de carga inductiva puede impulsar nuestro futuro electrificado. Estos proyectos conjuntos son pasos apasionantes en nuestro trabajo para conseguir una prolongada vida útil de las baterías, menor inquietud por la autonomía, mayor eficiencia energética, menor tamaño de las baterías, un rendimiento excelente y la reducción de peso y de costes”.
El trabajo en “Arena del Futuro” muestra que un BEV, como el nuevo Fiat 500, equipado para probar el sistema, puede viajar a velocidades típicas de autopista sin consumir la energía almacenada en su batería. Las pruebas también demuestran que la eficiencia del flujo de energía desde el pavimento al coche es similar a la eficiencia típica de las estaciones de carga rápida, de manera que el conductor no necesita detenerse para recargar. Por otra parte, las mediciones de intensidad magnética de campo evidencian que no hay ningún impacto en la persona que conduce, ni en los pasajeros.
En el evento, se exhibió un Maserati Grecale Folgore para anunciar la próxima participación de Maserati en el proyecto. El Folgore representa la versión totalmente eléctrica de Maserati, que electrificará toda su gama de productos para 2025. El vehículo estará especialmente equipado y recorrerá el circuito "Arena del Futuro” para recopilar datos y generar un detallado análisis de rendimiento.
“Arena del Futuro” está alimentado por corriente continua (CC), que ofrece varias ventajas concretas y únicas:
La DWPT es una de las tecnologías destinadas a simplificar el acercamiento del cliente a la movilidad eléctrica y, en última instancia, responder de manera tangible a las necesidades de descarbonización y sostenibilidad medioambiental del sector de la movilidad. La revista Time citó el sistema de carga inductiva en la carretera, presente en “Arena del Futuro”, como uno de los 100 inventos más importantes de 2021.
Estos objetivos se pueden alcanzar gracias a las tecnologías innovadoras que ofrecen 5G, IoT (Internet de las cosas) y soluciones de aplicación basadas en IA, que facilitan el intercambio de información entre el vehículo y la plataforma de gestión del sistema, lo que aumenta la seguridad en carretera y la eficiencia en los desplazamientos. La transferencia inductiva de energía de DWPT significa que no hay cables expuestos, manteniendo la superficie de la carretera segura para que la gente camine.
La tecnología atrae interés para su desarrollo comercial a escala mundial debido a la versatilidad de sus versiones inductivas dinámica y estática. Además de su utilidad en carreteras y autopistas, también es óptima cuando se combina con otras infraestructuras, como puertos, aeropuertos y aparcamientos.