Formación

El sector de la medicina estética como fuente de empleo

María Moreira | Sábado 16 de julio de 2022

Dicen que el verano es una época difícil para cambiarse de trabajo. Sin embargo, en algunos centros de formación saben que puede ser la mejor. El futuro alumno está relajado, tiene tiempo para pensar, pararse y tomar esa decisión que lleva meses o años sabiendo que debe tomar. ID:85056



Para realizar esta información hemos contado con la colaboración de ESSAE Formación cuyos cursos de estética ESSAE están orientados al mercado laboral, a lo que buscan las empresas y tienen prácticas garantizadas para sus alumnos. En ESSAE transforman la vida de los alumnos, los forman en profesiones muy vocacionales y con un altísimo ratio de empleabilidad. 9 de cada 10 alumnos trabajan en el ámbito socio sanitario en los tres primeros meses una vez acabado su curso. Ese es su propósito: ayudar a las personas a conseguir un empleo que dé sentido a su vida.

Los cursos de tanatopraxia son necesarios para poder trabajar en el último paso que consiste en vestir al difunto, maquillarlo para cubrir las imperfecciones o la coloración inadecuada para la presentación o la puesta en el ataúd.

Este tratamiento completo se lleva a cabo durante un período de aproximadamente dos horas. No es necesario refrigerar los restos después de la tanatopraxia. El tratamiento permite conservar los restos durante varias semanas. En el cuerpo vivo, cuando se bloquea una vena o una arteria, la sangre fluye a través de la circulación colateral para abastecer a los órganos y tejidos. Después de la muerte, durante los cuidados de preservación, el líquido inyectado sigue la misma ruta. Sin embargo, si todas las colaterales están bloqueadas, el líquido no podrá no podrá pasar, pero un fenómeno de ósmosis aún puede impregnar los tejidos vecinos.

Los cuidados de tanatopraxia engloban un conjunto de actuaciones que se realizan sobre el cuerpo de un difunto para limpiarlo, retrasar los fenómenos de tanatomorfosis, remediar la aparición de determinadas manifestaciones post mortem, restablecer, si es necesario, la integridad del cuerpo tras diversos traumas (muerte accidental, muerte violenta, autopsia, etc.), y, por último, vestir y asear al difunto para que pueda ser visitado por sus familiares y amigos.

El futuro de los profesionales de la salud

Los profesionales de la salud han desempeñado un papel fundamental a lo largo de la actual pandemia de coronavirus, al surgir nuevas demandas de terapeutas respiratorios, especialistas en telesalud y otros expertos para ayudar a combatir el virus. Esta crisis también ha provocado una tensión sin precedentes en nuestra salud mental y física, recordándonos la importancia de cuidarnos a nosotros mismos, y a los profesionales médicos que nos ayudan a hacerlo.

No se espera que la demanda de profesionales de la salud disminuya pronto. La atención sanitaria añadirá millones de nuevos puestos de trabajo a la economía mundial, la mayor cantidad que cualquier otro campo. Este crecimiento se debe principalmente al envejecimiento de la población, que tendrá una mayor necesidad de servicios sanitarios.

Sin embargo, la pandemia también ha provocado una nueva demanda de determinados puestos. La pandemia de Covid-19 ha exacerbado realmente los retos de reclutamiento y contratación de personal de primera línea. Estas son las personas que trabajan en como ayudantes, asistentes o sacando sangre, por ejemplo. Los enfermeros, los asistentes de terapia ocupacional y los asistentes de fisioterapia encabezan la lista de los empleos sanitarios de más rápido crecimiento en la próxima década, seguidos de cerca por los asistentes de salud a domicilio y de cuidados personales.

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