Motor

BYD Tang

Un SUV grande 100% eléctrico, potente y superequipado

Mariano García Viana | Lunes 09 de octubre de 2023
Segundo modelo de la marca china en España que, con sus siete plazas y su tracción a las cuatro ruedas, le hace ser un coche muy polifacético y capaz, pues también su habitáculo es envidiablemente amplio.

Como decimos, el Tang es un gran crossover, pero con la característica de, además de ser eléctrico 100%, de ser un vehículo que pudiéramos llamar Premium por su excelente acabado y su numeroso equipamiento, que no tiene nada que envidiar a modelos de marcas más que reconocidas en ese segmento. Al igual que apreciamos en el Atto 3, probado hace unas semanas que, dentro de las marcas de origen chino, BYD se podría calificar como una marca Premium a pesar de su amplia producción, en el Tang se confirma esa afirmación.

Pero el Tang no se “conforma” con esas exclusivas virtudes, sino que también puede presumir de disponer de una potencia tan elevada como la de un deportivo de “campanillas”, nada menos que disponemos de 517 CV y un par de 680 Nm, casi nada. Los “responsables” de esta potencia tan sobresaliente, son dos motores eléctricos, situados transversalmente en cada uno de los ejes. El primero de ellos, el delantero, dispone de una potencia de 245 CV y un par de 350 Nm, mientras que el segundo, el trasero, ofrece 272 CV y un mismo par de 350 Nm. La suma de los dos, es la ya mencionada de 517 CV, además, el funcionamiento de ambos, proporciona la tracción a las cuatro ruedas, dato muy importante a la hora de circular fuera de la carretera.

Para proporcionar y almacenar la energía eléctrica que mueva esos potentes motores, el Tang dispone bajo el piso, prácticamente a todo lo largo, de una batería, de 86,4 kWh, cuyo acumulador es de litio hierro fosfato, una tecnología algo diferente a la empleada normalmente por la competencia, sólo litio, pero que tiene la ventaja de ser más económica y de perder menos efectividad con el paso de las sucesivas cargas. La autonomía homologada es de 400 km., que se pueden conseguir, aunque se circule parte por autovía y parte en ciudad, siempre que no se trate de sacar partido constantemente a los 517 CV disponibles, en cuyo caso la autonomía se resiente, aunque la verdad es que no de forma ostensible. En la circunstancia que si se nota un cambio en la autonomía y es para bien, en el sentido de prolongarla, es en una circulación constante por ciudad, en cuyo caso se pueden superar ampliamente los citados 400 km.

En cuanto a la recarga, digamos que la máxima potencia en corriente continua es de 120 kW y en corriente alterna de 11 kW. Con ello, en cargar la batería desde el 0% al 80% a 120 kW se tarda 48 minutos. En un cargador doméstico, en recuperar unos 200 km de autonomía, hemos tardado unas 8 horas. Como es fácil de adivinar, las prestaciones que se pueden conseguir con este potente SUV, a pesar de los casi 2.500 kg. de peso, son realmente brillantes, sobre todo en lo que se refiere a la aceleración que, de 0 a 100 km/h, sólo se tardan 4,6 segundos, o sea como el de un auténtico coupé deportivo, mientras que la velocidad máxima se cifra en los 180 km/h.

El conductor puede elegir entre tres programas de conducción, Eco, Sport y Snow, siendo el Eco seguramente el más utilizado, no ya debido a su menor consumo eléctrico, a que es más que suficiente como para impulsar al Tang con una energía y dinamismo superior a la mayoría de los modelos de su tamaño y no digamos si aplicamos la opción Sport, las reacciones son de un deportivo, solamente limitadas por su gran volumen y peso, lo que no es óbice para conducir el Tang con decisión y aprovechando su alta potencia, pues su manejo es fácil y noble de reacciones en todo tipo de trazados, pues sus suspensiones, con sistema McPherson en ambos ejes, con sus correspondientes barras estabilizadoras, sujetan al coche con una envidiable eficacia y gracias a su firme suspensión, que absorbe perfectamente las irregularidades del asfalto, evitando balanceos de la carrocería al cambiar de trayectoria, pero a la vez ofreciendo un alto nivel de confort a los ocupantes. A pesar de sus casi dos toneladas y media de peso, los cuatro discos ventilados y perforados, Brembo Sport, se encargan de detener al Tang sin problemas ni muestras de fatiga por una intensa utilización.

Como ya hemos comentado, el Tang es un SUV de tamaño grande, casi cinco metros (4.870 mm) de longitud y una considerable anchura, aunque por su diseño no lo parece. Su frontal, bien estudiado a pesar de esa anchura “extra”, por lo que favorece la aerodinámica (sólo de 0,33 Cx), esta dominada por una calandra, más estrecha en su parte superior y que se va ensanchando según se despliega hacia la inferior, formada por una trama de pequeños rectángulos negros. En un claro ejercicio de diseño, una franja cromada recorre toda la anchura del morro, separando una franja negra, entre el capó y la calandra propiamente dicha y que se prolonga por encima de los faros y en cuyo centro luce el ovalado logo de la marca. Los mencionados faros son naturalmente full led y como es de esperar su poder de iluminación es muy eficaz y potente. Para terminar con este frontal, digamos que en la parte inferior del paragolpes se abre una negra línea de refrigeración, que luce en el centro el radar de aproximación y en los laterales una hendidura de diseño en forma de L.

En el aspecto lateral se aprecia claramente la longitud del coche, que visualmente parece aún más largo debido a la forma de la tercera ventanilla, que se estrecha y baja decididamente en su parte posterior. Una línea plástica protectora, recorre la parte baja de ambos paragolpes, los pasos de rueda y zona inferior de las puertas, que son recorridas también con unas suaves formas en su zona central. Tanto en su parte delantera, como en la trasera, se aprecian las prolongaciones laterales de los faros y de los grupos ópticos posteriores. Igualmente se destacan las oscuras llantas de nada menos que 22”, equipadas con neumáticos de perfil superbajo, muestra de lo deportivo que puede ser el coche. Ya en la parte trasera son destacables, la luneta de regular tamaño, pero muy protegida por la visera superior que se prolonga por los laterales y también los altos pilotos en posición horizontal, que ocupan todo el ancho del coche, ya que están unidos por una doble franja lumínica roja.

Como era de esperar, el habitáculo es amplio, y como ya vimos en el recientemente probado Atto 3, bien terminado y con el empleo de materiales de calidad. Aunque no tan creativo como el del mencionado Atto, el Tang también puede presumir de ofrecer un diseño general agradable visualmente y funcional en la práctica, mezclando en esta ocasión el color beige con el negro, el gris azulado y costuras crema. El salpicadero desde luego no esta exento de creatividad. Presenta un cuadro que es una pantalla de 12 pulgadas, muy colorista y fácil de interpretar en todas las opciones que se pueden elegir en su configuración, mientras que la pantalla multifunción tiene un tamaño de 12,8 pulgadas, disponiendo de la facultad de girar, bien en posición horizontal o bien en vertical. Toda la información que ofrece tiene una excelente calidad de imagen en todas las múltiples funciones que puede elegir el conductor. Por detrás de la pantalla, desde el empotrado cuadro y hasta el extremo del área del acompañante, se extiende una zona oscura brillante que combina perfectamente con la de imitación a piel normal y piel vuelta, en color gris azulado, de las zonas inferiores. La consola dispone de cuatro horizontales bocas de salidas de aire del climatizador y bajo ellas, ya en la zona horizontal, un espacio con tapa e inmediatamente después la pequeña palanca del selector del cambio, R, N, D y P y al lado de ella el botón de arranque y parada y en la misma “plataforma”, los pulsadores de varias funciones, así como los rodillos del volumen y selección de la forma de conducción. Al ancho reposabrazos central, de apertura de libro, le precede una pequeña plataforma inclinada para la carga inalámbrica del móvil.

Los asientos tienen un aspecto estupendo y realmente lo son. Tapizados en piel con costuras en forma de pseudorombos, en color canela y gris azulado con costuras cremas, resultan cómodos, además de sujetar muy bien el cuerpo, en lo que a los delanteros se refiere, que también disponen de reglajes eléctricos. La segunda fila, puede acoger perfectamente a tres personas por espacio disponible, aunque como pasa siempre, el ocupante central irá algo más incómodo por la propia configuración del asiento. En la tercera fila, no olvidemos que el Tang dispone de 7 plazas, se dispone de dos asientos, lo suficientemente cómodos y espaciosos para que dos adultos, viajen sin problemas. En esta configuración de tres filas de asientos, el maletero ofrece una capacidad de 235 litros, mientras que, si la tercera fila se pliega, el espacio de carga sube a los 940 litros y ya si plegamos la segunda y tercera fila, disponemos de una furgoneta a nuestro servicio, 1.665 litros.

Por todo el habitáculo disponemos de huecos para dejar envases de bebidas o ubicar todo tipo de pequeños objetos. Las luces interiores son de led y por varias partes del interior, salpicadero y paneles de puertas, están iluminadas por discretas fuentes de luz cuyo color se puede seleccionar en la pantalla multifunción. El equipo de sonido es de buena calidad, a pesar de que sólo se pueden seleccionar emisoras digitales en FM, con lo que el ruido e interferencias esta asegurado. El equipamiento es de lo más completo y pocas, pero que muy pocas cosas se pueden echar de menos, tanto en materia de seguridad, como en elementos de confort o de ayuda a la conducción. Por citar algunos de ellos destaquemos, los citados frenos Brembo Sport, cámara de visión en 360º, calefacción por bomba de calor, velocidad de crucero adaptativo, aviso y frenada de emergencia, asistente de cambio de carril, aviso de tráfico cruzado en la parte trasera, detección de vehículos en el ángulo muerto, etc., etc.


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