NASDAQ-100; innovación, crecimiento y rendimiento

Cuando hablamos del Índice Nasdaq 100 empresas nos referimos a una cesta en la que cotizan activamente las cien empresas estadounidenses e internacionales más importantes -cuya capitalización debe ser por lo menos de 500 millones de dólares y contar con un volumen medio de negociación de por lo menos 100.000 acciones- pertenecientes a sectores concernientes a la biotecnología, tecnología, informática y telecomunicaciones entre otros.

Las principales diferencias con respecto al Dow Jones30 y el S&P500 radican en que el índice representa a las principales cien compañías no financieras del sector industrial, incluye empresas no estadounidenses y su valor toma en cuenta la capitalización bursátil de las empresas que lo conforman.

Es el índice que alberga algunas de las empresas más sobresalientes del universo de la innovación y las ideas como Google, Tesla, Facebook, Amazon o Microsoft. La innovación es una característica inherente al Nasdaq 100.

Sectores que incluye

El índice, fundado en Wall Street el 31 de enero de 1985, está compuesto en un 56% por empresas tecnológicas -Facebook, Microsoft, Apple…- frente al 22% que representan las empresas de servicios al consumidor -Amazon, Starbucks…-. Un porcentaje superior al 11% está basado en empresas sanitarias que crecen a gran velocidad como Alexion o Regeneron y más del 5% se encuentra representado por empresas de bienes de consumo del origen más variado como Netflix, Tesla, Mattel o Kraft Heinz.

En cuanto a las empresas industriales -PACCAR, CSX o Fastenal-, su representación es del 5,1% y comprende tanto empresas de transporte y fabricantes de herramientas como fabricantes de camiones, entre otros.

Evolución del Nasdaq 100

En el 2020 el pánico que inundó los mercados ante los efectos de la pandemia del coronavirus también se reflejó en la caída del índice, que sin embargo consiguió recuperarse. En el momento de redactar este artículo el índice ya ha superado los 15.000 puntos habiendo alcanzado por tanto la zona de resistencia que se situaba entre los 15.000 y 16.000 puntos, aunque evidentemente los datos van cambiando.

Para el inversor que esté esperando su oportunidad de compra la mejor opción tal vez consista en esperar a que se produzca una nueva corrección como la acontecida en mayo, para adquirir los títulos de las grandes tecnológicas que ya han demostrado antes su fuerza –como lo son Alphabet, Facebook, Apple, Netflix y Amazon-, o invertir en él a través de un fondo de inversión, sin embargo es muy importante señalar que un buen rendimiento pasado no tiene por qué asegurar un buen rendimiento futuro.

Los datos muestran el espectacular crecimiento del rendimiento del Nasdaq 100 desde su creación y una evidente tendencia alcista a largo plazo pero, como anteriormente hemos comentado, no es ajeno a las catástrofes mundiales ni a la reacción de los inversores. Por su parte, los traders que se dedican a la especulación tienen la posibilidad de invertir en él tanto en los momentos en los que el índice florece como en los que la situación se vuelve más complicada, especulando tanto con los ciclos alcistas como bajistas, pero por supuesto con su estrategia adaptada a cada ciclo, a través de la negociación con CFDs, en los que las posiciones están apalancadas con lo que es esencial estar al corriente de los riesgos que involucran, y que se diferencia de la inversión en Nasdaq por el camino tradicional que hemos mencionado anteriormente.

Lo cierto es que el Nasdaq 100 ha registrado un máximo histórico y parece sustentarse sobre unos cimientos sólidos donde las principales empresas que lo conforman dan muestras de su capacidad de renovarse y crecer así como de ofrecer rendimientos, aunque los traders e inversores deben estar atentos a la evolución de las tasas de interés de EEUU ya que pueden influir en este mercado de manera contundente puesto que las acciones tecnológicas se benefician de un entorno con bajas tasas de interés.