El Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) es una enfermedad que degrada la vida del paciente, conlleva un importante absentismo laboral, con un promedio de 60 días por baja, y un alto número de casos de invalidez laboral permanente. Este deterioro en la calidad de vida conduce al 50% de los adultos con TOC a la separación de sus parejas. Así se desprende de una revisión bibliográfica realizada por el Grupo Psicólogos de Madrid - Psicólogo de Familia.
El TOC es un trastorno de ansiedad serio caracterizado por pensamientos intrusivos (ideas fijas que con tenacidad asaltan la mente en contra de la voluntad del sujeto) recurrentes y persistentes, que producen inquietud, temor o preocupación y que dan lugar a conductas repetitivas, llamadas compulsiones o rituales, mediante las que el sujeto intenta reducir la ansiedad asociada. Es una de las cinco enfermedades mentales más frecuentes, puede aparecer a cualquier edad tanto en hombres como mujeres y llegar a ser invalidante. La base fundamental del TOC son las obsesiones o pensamientos obsesivos que provocan una terrible ansiedad.
Según explica el psicoanalista y médico de familia Gerardo Castaño Recio, coautor de esta revisión, “la naturaleza de estos pensamientos obsesivos puede ser variada. La ansiedad que producen estas obsesiones obliga al paciente a realizar actos repetitivos y metódicos con los que trata de conjurar el peligro por el que se siente amenazado. Estos rituales compulsivos pueden ser actos como lavarse las manos repetidamente, alinear los objetos de forma milimétrica, realizar cuentas sin fin o repetir frases de forma exhaustiva”.
La revisión bibliográfica realizada por estos expertos también señala que “con frecuencia, el TOC se asocia a trastornos depresivos y al menos dos terceras partes de los pacientes con TOC sufren depresión en algún momento de su vida. La causa del TOC es hoy por hoy desconocida y se cree que en su aparición influyen tanto factores genéticos como ambientales”.
Dado que los rituales del paciente con TOC son largos, tediosos y repetitivos, esto les obliga a perder mucho tiempo, por lo que con frecuencia pueden llegar tarde al colegio o al trabajo, ocasionando no pocos problemas familiares y laborales.
En el tratamiento del TOC se emplean psicofármacos, sobre todo aquellos que están implicados en el metabolismo de la serotonina. Los psicofármacos ayudan a cuatro de cada cinco pacientes a disminuir sus síntomas.
Los expertos concluyen su revisión asegurando que “la psicoterapia también es útil en el tratamiento del TOC. La psicoterapia conductual, en concreto la EPR (Exposición y Prevención de Respuesta), ayuda a disminuir los rituales compulsivos, la psicoterapia cognitiva que puede ayudar a disminuir las obsesiones, contrarrestando los sentimientos de ansiedad o peligro. La psicoterapia psicoanalítica también es usada para indagar el origen inconsciente de los pensamientos obsesivos y los rituales compulsivos y disminuir los síntomas.