Hugo Galindo, durante estos últimos 8 años, ha participado activamente en el crecimiento continuado de GRENERGY, llevando a cabo las labores de dirección y de gestión de la empresa en España y en las delegaciones internacionales.
Hugo Galindo es Licenciado en Administración y Dirección de Empresas por la Escuela de Administración de Empresas de Barcelona (EAE) y Bachelor’s degree in Economics por la Nottingham Trent University de Gran Bretaña. Con más de 13 años de experiencia en la gestión y dirección comercial de grandes proyectos de ingeniería y tecnologías de la información a nivel internacional en INDRA, especialmente en los continentes americano y asiático, en 2008 entró a formar parte de GRENERGY como Director de Desarrollo de Negocio. Durante estos últimos 8 años ha participado activamente en el crecimiento continuado de GRENERGY, llevando a cabo las labores de dirección y de gestión de la empresa en España así como en las delegaciones internacionales.
¿Cuál es la situación de las energías renovables en España ahora?
En materia de energías renovables, España ha hecho cosas muy buenas y cosas muy malas. España fue de los primeros países europeos que fomentó la implementación de las energías renovables. En los primeros años, a partir del 2003/04, empezó el boom de las renovables con los grandes incentivos a la eólica y a la fotovoltaica, de tal manera que se pudiera cumplir el objetivo de que el 20% de la energía instalada en España en el 2020 fuera a través de las energías renovables. Se hicieron cosas muy buenas como fijar estos objetivos, pero también muy malas como la manera de implementarlas.
Se crearon unas tarifas y unas primas para promover las renovables y todo el sector de la construcción más las empresas dedicadas a las renovables se pusieron a trabajar. El problema estaba en que las subvenciones eran desmesuradas.
Posteriormente, coincidieron varios factores como la crisis del ladrillo y la crisis mundial que todos los sectores sufrieron. Todo acaba en 2008, año en el que el gobierno había previsto que se implementaran 5000 Mw. pero sólo se instalaron 3000. En esas condiciones el sistema de tarifas era inaguantable. Con el sistema de tarifas de los diferentes gobiernos se frena todo el desarrollo. Se sufre un parón a partir del año 2009/10 porque no permite más energía renovable. Aun así en España ya hay 4.000 Mw. en solar fotovoltaica y 2.000 en eólica.
A partir del 2011 muchas empresas deciden internacionalizarse porque en España no se puede instalar un Kw. verde.
También se han hecho cosas bien. El desarrollo que se produjo entre el año 2005/06 a 2008 consiguió que la curva de madurez de la fotovoltaica, sobre todo, se acelerara muchísimo con la implementación y desarrollo de todos los proyectos.
Entonces se estimaba que la tecnología alcanzara su grado de madurez en 15 años y lo hizo en cinco, lo que permitió que las empresas españolas se internacionalizaran a otros mercados y pudieran competir de tú a tú con el resto de tecnologías.
Después del 2011, en algunos lugares del mundo se alcanza esa viabilidad económica sin ningún tipo de subvención y las renovables van compitiendo según en qué mercados y qué tipos de variables. Se cruzan con el resto de tecnologías y llegamos a 2016 en que ya nadie discute que, tanto la fotovoltaica como la eólica, son las más competitivas económicamente hablando, por encima de cualquier otro tipo de energía.
Ahora mismo, la energía renovable es un boom por dos aspectos: Primero, porque realmente el cambio climático es un hecho y, segundo, es mucho más económico generar energía mediante la solar fotovoltaica y la eólica que con cualquier otro tipo de fósil.
¿Cuál es la posición de Grenergy Renovables dentro del sector?
Nosotros empezamos como ingeniería promotora de proyectos fotovoltaicos en España. Nuestro objetivo siempre fue convertirnos en productor independiente de energía (IPP).
Desde 2012 en que nos internacionalizamos, consolidamos un modelo de negocio para cubrir todo el ciclo de vida de un proyecto.
Desarrollar un proyecto desde cero administrativamente y técnicamente no es fácil. La primera fase es conseguir los permisos.
Para que haya proyecto de energía se tienen que cumplir cuatro condiciones básicas: Que haya recurso (sol, viento); que haya disponibilidad de una superficie donde montar ese proyecto; que haya evacuación, o sea, que la energía que generas la puedas verter a la red; y que sea financiable. Si se cumplen las cuatro se puede empezar a desarrollar ese proyecto.
La segunda fase es la construcción y la tercera fase es la operación o venta del proyecto. Nosotros llegamos a 2012 consolidando nuestro proyecto de negocio y ahora mismo todas estas fases las cubrimos. Podemos asumir proyectos de cualquier magnitud, hemos pasado de ser una empresa pequeña a ser una mediana y a tener un nombre respaldado por nuestros proyectos. Ya se nos conoce en el sector en todos los países en los que estamos presentes. Creemos que hicimos un buen trabajo.
Cuénteme más de su proceso de internacionalización
En el año 2009/10 cuando hubo esos recortes en España comenzamos a mirar al exterior. Latinoamérica era para nosotros el mejor continente. Se adaptaba a nuestras circunstancias como empresa y era el continente que estaba desarrollando más seriamente los proyectos.
Dentro de Latinoamérica vimos que Chile era el país adecuado para empezar. A finales de 2011 decidimos desarrollar grandes proyectos en el norte en el Desierto de Atacama. En 2012 comenzamos también a desarrollar alrededor de Santiago de Chile y tenemos más de 300 Mw. instalados allí. Todo esto se ha consolidado en 2015.
El siguiente país que nos intereso fue México que tiene muchos millones de habitantes y unos recursos espectaculares y, al mismo tiempo, unas necesidades energéticas brutales. El gobierno mexicano se dio cuenta de todas estas circunstancias y en 2014 hizo una reforma energética muy profunda, que ha culminado este año. En 2013 nos instalamos en México y nos especializamos en proyectos de hasta 30 Mw. que era lo que permitía el régimen de pequeño productor. Este año hemos podido poner en valor este desarrollo.
En 2014 se anunciaron unas subastas en Perú para el 2015. Nos presentamos con un gran proyecto y nos lo adjudicaron. Fue la subasta más competitiva en Latinoamérica. Obtuvimos unos precios de venta de energía renovable muy bajos. Se habían presentado más de 100 proyectos para varias tecnologías y nos lo adjudicaron a nosotros. Enel y Grenergy Renovables fueron los dos únicos postores que se adjudicaron la potencia ofertada.
Tenemos un pipeline bastante consolidado en estos países.
Hemos abierto también una oficina en Colombia en 2015, estamos desarrollando proyectos tanto eólicos como solares allí también. Este país tiene muchas necesidades energéticas.
Todo esto supone 1.000 Mw en desarrollo y varias plantas en construcción. También es fuente de riqueza para estos países, generamos puestos de trabajo, lo cual es muy importante para los distintos gobiernos.
En España hemos construido en Cuenca, Toledo, Granada, Sevilla, Ávila y Murcia. En total 20 Mw construidos y 2 en desarrollo. Desarrollamos desde hace un par de años grandes proyectos, uno de 100 Mw y otro de 50 Mw para cuando se pueda volver a construir y a ese proyecto le llamamos “ PROYECTO 2020”. Somos la puerta de Europa y tarde o temprano en España generaremos energía fotovoltaica. España necesita volver a la industria.
Y, por ultimo en 2015, empezamos a cotizar en Bolsa con bastante éxito.
Planes de futuro para Grenergy Renovables
Sobre todo queremos consolidarnos en todos los mercados en los que estamos presentes. Somos una empresa joven y queremos crecer a la medida de las necesidades. Todos nuestros profesionales están muy preparados y deseamos ser un referente en el sector. Para eso tenemos que hacer las cosas bien. Vamos despacio pero seguro.
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