www.economiadehoy.es

¿Para qué sirve la ética en las organizaciones?

¿Para qué sirve la ética en las organizaciones?
domingo 13 de diciembre de 2015, 21:23h

Nines López Fraguas, Consultora en Desarrollo Organizacional, escribe para Funts Project una reflexión sobre la necesidad de construir una ética compartida dentro de las organizaciones para poder convivir y trabajar juntos, respetando la ética personal de cada uno.

Se dice que todos sabemos de ética, porque todos, en el proceso de desarrollo como personas adultas, elaboramos ideas sobre lo que es bueno y malo, sobre lo que da y quita dignidad, sobre lo correcto y lo incorrecto, sobre lo que nos hace humanos o nos deshumaniza. Todos tenemos y vivimos con una ética personal, más o menos sólida. El problema que tenemos entre manos es la necesidad de construir una ética compartida para poder convivir y trabajar juntos, respetando la ética personal de cada uno.

¿Y cuál serían los componentes de esa ética compartida en las organizaciones?

Nines López Fraguas, basándose en el pensamiento de Adela Cortina, directora de la Fundación ETNOR (Ética de los Negocios y de las Organizaciones) propone una serie de puntos a tener en cuenta para crear una ética compartida:

- Las organizaciones éticas son el pilar más importante para construir una buena sociedad, el contexto de las relaciones entre las personas y sus proyectos de vida
- La clave es que la organización y todos sus miembros deben tener claro y aceptar cuál es el bien interno que la organización, según la actividad que realice, no puede dejar de proporcionar a la sociedad.
- Es legítimo obtener bienes externos, por ejemplo, dinero, estatus, poder, satisfacción, relaciones, etc., pero nunca a costa del bien interno.
- La perversión se produce cuando un bien externo se pone en el lugar del bien interno. Vemos muy claramente esta perversión en las empresas de mercado que creen que su bien interno es “ganar dinero”, siendo este un bien completamente legítimo, pero externo. Muchos de los males de nuestras sociedades, basadas en una economía de mercado, provienen de esta perversión.
- Cada organización, según su actividad, requiere de unos valores que debe identificar y fomentar. Los valores de las organizaciones sanitarias no serán los mismo que los de las organizaciones de información y comunicación o que los de las organizaciones que se dedican a la educación
- Pero no se debe olvidar que la razón de ser de la ética es el comportamiento. El comportamiento convencido, nunca impuesto ni coaccionado. Los valores no son nada si no se convierten, por convicción, en hábitos de conducta de los miembros de la organización, en clima cultural, en identidad organizacional.
- La coherencia entre lo que se dice y lo que se hace es una de las bases de la confianza. La búsqueda de coherencia entre los valores –lo deseable- y las virtudes –el modo de ser y de actuar- ha de ser una meta constante en las organizaciones que son conscientes de su responsabilidad en la construcción de una sociedad buena, justa y solidaria.
- Y ¡aviso a caminantes! entre lo deseable –los valores- y lo real –la acción- siempre va a haber una brecha. La sabiduría ética trata de minimizar esa brecha, pero aceptando que el ser humano se mueve en la complejidad, la incertidumbre y la imperfección y que cualquier propuesta de actuación debe partir de este marco.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios