En una sesión un tanto huérfana de noticias positivas, el Ibex ha demostrado su fortaleza anotándose una subida del 0,37% y cerrando por encima de los 10.400 puntos por primera vez desde noviembre de 2015.
El resto de índices europeos han finalizado con ganancias de en torno al 0,40%, lo que permite al DAX alemán rozar máximo históricos.
La caída del euro respecto al dólar (1,072) ha podido influir en ello y ha compensado el mal sabor de boca que han dejado las cifras de confianza publicadas por Eurostat, algo por debajo de lo previsto.
Junto con la incertidumbre política, probablemente a lo que más atención prestan los mercados es a la inflación. Tras subir en los últimos meses, las cifras de España y Alemania demuestran una desaceleración de la misma. El IPC español de marzo cae desde el 3% hasta el 2,3%, y el alemán desde el 2,2% hasta el 1,6%. Aunque la caída ha sido más pronunciada de lo esperado, lo cierto es que las bolsas ya estaban en sobreaviso; recordemos que el IPC se mide en tasa interanual y que fue precisamente en marzo de 2016 cuando el crudo empezó a rebotar tras tocar mínimos. Mañana la clave estará en conocer el IPC agregado de la zona euro, que se prevé caiga dos décimas hasta el 1,8%.
Dentro del Ibex tres valores han subido más de un 2%: ACS, Grifols y Arcelormittal. El siguiente ha sido Repsol, que ha agradecido la continuación del rebote del precio del petróleo. Han cerrado en rojo compañías como Sabadell (-0,47%), Indra 8-0,51%) o Merlin (-0,82%). Y es que no ha sido buen día para las inmobiliarias. En su segundo día de cotización Neinor Homes ha retrocedido un 3,10% y se cambia al mismo precio que el de su debut.
Dentro de la vorágine que registran las acciones de Abengoa en los últimos días, hoy sus títulos de la clase B se han desplomado un 44% (clase B). Tras dispararse cuando se confirmó el proceso de recapitalización, ahora reacciona ante la avalancha de títulos que comenzaran a cotizar mañana y que provocarán una dilución para los accionistas preexistentes del 95%.
Un día después de que se iniciase la cuenta atrás del Brexit, la libra ha rebotado tímidamente. Sorprende ver las decisiones que ya empiezan a tomar los grandes bancos de inversión de la City. Según Bloomberg, JP Morgan se encuentra en negociaciones avanzadas para adquirir un edificio en Dublin con capacidad para 1.000 trabajadores. Dirigentes de Citigroup han reconocido que podrían trasladar miles de empleos fuera de Londres y la entidad británica Lloyds ha publicado hoy que abrirá un nuevo centro para su negocio fuera de Reino Unido en la ciudad de Bruselas.
Las bolsas de Wall Street han comenzado la sesión dudas pero al cierre del mercado europeo cotizaban con ganancias. El PIB del cuarto trimestre se ha revisado al alza hasta el 2,1% gracias al empuje del consumo, que creció un 3,5%, y de los beneficios empresariales, que aumentaron un 0,5%. Sin embargo, el déficit comercial ha restado puntos al crecimiento del PIB debido al descenso de las exportaciones y repunte de las importaciones, ambas influidas por la fortaleza del dólar.
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