Los pasos que debe dar toda empresa para conseguir llegar al éxito.
Antonio Nieto Rodríguez, experto mundial en la gestión e implantación de proyectos estratégicos y ex Presidente de la Junta Directiva de Project Management Institute, explica los tres grandes errores que hace que desde empresas de diferentes tamaños, PYMES o multinacionales, hasta el propio Gobierno de España y con sus políticos a la cabeza, dejen de ganar más de un 15% de los beneficios económicos posibles.
Antonio Nieto Rodríguez cuenta con una dilatada carrera internacional en el sector del Management y está considerado por prestigioso ranking mundial de Thinkers50, como uno de los pensadores más influyentes del mundo. Sera el único representante español que participará, hoy y mañana, como ponente en la conferencia más importante de pensadores de Management que se ha celebrado en Europa en los últimos 10 años: The European Business Forum, el Davos del Business Thinking. El congreso contara con la participación del profesor de Harvard, Michael Porter, la profesora de Columbia, Rita McGrath, el coach número uno mundial, Marshall Goldsmith, o con Lars Sørensen, considerado por Harvard Business Review como el mejor CEO del mundo.
Para Antonio Nieto Rodríguez, la primera de las claves para el futuro de cualquier empresa es la de establecer su razón de ser, y a partir de ahí, elegir las prioridades en cuanto objetivos y proyectos estratégicos. Saber diferenciar las situaciones del día a día y los retos a los que se enfrenta. De acuerdo con su reciente investigación, cuanto menos objetivos y unas prioridades más definidas, más posibilidades de éxito.
“El Gobierno actual por ejemplo tuvo claro cuál sería su reto desde el inicio: el problema económico de España, incluso por encima del tipo de contratos laborales. Esto marco su primera legislatura. Aquí vemos que el actual Gobierno se marcó claramente ese objetivo y evitó desviarse frente a dicotomías como las de los contratos precarios. Tal y como comentaba en el primer punto, la prioridad era la economía y no se dejó desviar por el tipo de contratos que se llevarían a cabo. Ahora en esta segunda legislatura podrá dar un paso más en sus objetivos”, explica Antonio Nieto Rodríguez.
El siguiente paso son los proyectos, es decir en base a los dos puntos mencionados anteriormente se debe analizar los proyectos clave para otorgar los recursos disponibles para llevarlos a cabo. “Deberemos hacer un análisis en profundidad para descartar aquellos proyectos que no vayan alineados en la dirección de los objetivos y prioridades mencionados anteriormente”.
Hay que supervisar y renovar cada cierto tiempo los proyectos que nos marcamos en una empresa. Estudiar los éxitos y los fracasos para de nuevo ponerlo en marcha. Si se ha logrado, se celebrará y se elaborará un proyecto más ambicioso. Si no se consiguió se estudiará dónde falló para comenzar de nuevo reforzando los puntos débiles que provocaron la no consecución de los objetivos.
Entre los proyectos siempre debe existir uno al que se destine muchos recursos, y este es el de la formación. “Sin formación de alto nivel es prácticamente imposible llevar a término cualquier empresa. Y es aquí precisamente donde tanto las empresas como el propio Gobierno tiene el principal problema. Países como Singapur o Dubái han conseguido en tan sólo 40 años posicionarse como referentes mundiales de crecimiento. Han creado economías sólidas del desierto o de la nada. Esto se debe en que además de llevar a rajatabla todos estos puntos, han invertido sin reparos en formación de alto nivel, en Universidades de primer nivel, en áreas de conocimientos elementales como el Management, y esto ha creado líderes políticos capaces de transmitir y de llevar al éxito los planes estratégicos de estas ciudades y países. Uno de los puntos débiles de los políticos y empresarios españoles”.
El tercer paso tan importante como los anteriores es el de la comunicación. Si no comunicas a tus trabajadores o si el Gobierno no comunica los logros y éxitos, cualquier empresa que se realice no obtendrá impacto alguno. Esto es importante porque desmotivará. “Gran parte del éxito de implementar estrategias se basa en la comunicación. Gracias a esta comunicación se logrará inspirar. Cada vez que un proyecto se concluye con éxito, este se utiliza para resaltar el progreso del plan estratégico. Y esto es tan válido para una empresa pequeña, grande o incluso para el propio Gobierno”.
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