Alpine, que fue Campeón del Mundo de Rallyes en 1973 y salió victorioso en las 24 Horas de Le Mans 1978, ha sido también Campeón del Mundo LMP2 en FIA WEC la temporada pasada y ha conquistado el corazón de los amantes de la modalidad gracias a sus resultados deportivos. Además, la Marca ha despertado muchas vocaciones entre los pilotos amateurs, deseosos de disfrutar al volante de unos coches atractivos, ligeros y ágiles. Con esta perspectiva y cumpliendo con esta tradición, Alpine ha creado el A110 Cup, que saldrá a la pista en 2018.
Unas semanas antes de las primeras entregas de los inéditos A110
Première Édition a sus clientes, Alpine presenta el A110
Cup, que se exhibirá en competición, a partir de 2018, en los principales circuitos europeos, en el seno de la
Alpine Europa Cup. Aprovechando la ligereza y la agilidad del coche de serie, el Alpine A110
Cup ofrece unas prestaciones de gama alta, aunando así rendimiento, eficacia y placer de pilotaje.
Para garantizar el éxito de esta nueva aventura, Alpine ha confiado el estudio, el desarrollo, la producción y la comercialización del A110 Cup a Signatech. La estructura de Philippe Sinault, que inscribe a los Alpine A470 en el Campeonato Mundial de Resistencia FIA WEC, posee asimismo una sólida experiencia en el desarrollo de productos de competición-cliente. En asociación con los ingenieros que diseñaron el coche de serie, Signatech ha diseñado la versión de competición con un objetivo principal: proporcionar el máximo placer a los pilotos, tanto si son principiantes como experimentados.
Con un chasis bien concebido, un motor de 270 CV para 1050 kg de peso (3,9 kg/CV), un nivel de seguridad al máximo nivel y una electrónica a bordo digna de un prototipo de Resistencia, el Alpine A110 Cup promete eficacia y rendimiento. El Alpine A110 Cup, que se comercializará al precio de 100.000 € impuestos no incluidos, evolucionará en el marco de una competición que aúna rigor, profesionalidad y calor humano. Organizada por Signatech y con seis mangas en 2018, la Alpine Europa Cup recorrerá seis de los más grandes circuitos europeos. Esta serie internacional FIA recordará la Europa Cup que se organizó entre 1985 y 1988 con los Alpine GTA V6 Turbo. Los pilotos que deseen participar en la Alpine Europa Cup tendrán que manifestarse pronto, ya que la producción estará limitada a poco más de veinte ejemplares para la primera temporada.
Bernard Ollivier, director general adjunto de Alpine: «La creación del Alpine A110 Cup y su competición asociada, la Alpine Europa Cup, constituyen una nueva demostración de muestra pasión por el automovilismo. Hemos querido que el A110 Cup sea un auténtico coche de carreras, especialmente refinado y dotado de prestaciones de gama alta orientadas al rendimiento. Los competidores de la Alpine Europa Cup tendrán así el placer de pilotar un bonito coche cuya eficacia establecerá nuevas referencias. Asimismo, la organización de la competición cumplirá con los estándares fijados por Alpine: rigor y profesionalidad en la pista, y un buen ambiente y calor humano en el paddock. La Alpine Europa Cup servirá además de plataforma para animar nuestra comunidad de apasionados a través de Europa».
Philippe Sinault, director general de Signatech: «Es un gran orgullo para Signatech el haber sido elegidos para un proyecto tan complejo como este. De la dirección de estudios al taller de ensamblado pasando por el equipo encargado de organizar la Alpine Europa Cup, hemos movilizado todos nuestros conocimientos para cumplir con el pliego de condiciones elaborado por Alpine. El A110 Cup es un coche que no hace concesiones en materia de prestaciones, con un objetivo clave: proporcionar mucho placer a los pilotos. Esto se traduce de múltiples formas: en calidad percibida, búsqueda de eficacia y de ergonomía… Antes de ver a un pelotón de una veintena de A110 Cup lanzarse al Circuito Paul Ricard, nos queda aún mucho trabajo con el desarrollo y después con la construcción de los coches. El desafío es apasionante, tanto para Signatech como para Alpine».
Fabricado por la planta Alpine de Dieppe, el monocasco del Alpine A110 Cup se modifica para adaptar la geometría de suspensión, reducir la altura de la carrocería (-40 mm), ofrecer puntos de anclaje para el arco-jaula y adaptar la rigidez a las exigencias de la competición, especialmente el nivel de adherencia que proporcionan los neumáticos slicks. La concepción se ha llevado a cabo en el marco de una colaboración entre Signatech y Renault Sport Racing, que ha aportado su experiencia y sus medios de cálculo al proyecto. En el compartimiento del motor, estas modificaciones se traducen en el montaje de unos largueros específicos. Unidos a la parte trasera del arco-jaula, estas magníficas piezas de aluminio esculpidas en la masa permiten elevar el punto de anclaje de los triángulos superiores. Los triángulos inferiores están fijados en las dos semi bancadas mecano-soldadas que soportan al grupo motopropulsor.
En la parte delantera, estas modificaciones se traducen en el montaje de una bancada mecano soldada y pletinas de fijación para los triángulos superiores. Los cuatro combinados muelle-amortiguador suministrados por Öhlins son regulables en compresión y expansión. Al igual que el coche de serie, el Alpine A110 Cup está equipado con neumáticos Michelin. Las envolturas slicks o esculpidas han sido diseñadas para ofrecer el mejor equilibrio entre eficacia y longevidad.
La seguridad activa y pasiva del Alpine A110 Cup ha sido objeto de un cuidado muy especial. Para responder al desafío que supone integrar un arco de acero en un chasis de aluminio, los ingenieros y los técnicos han ideado una técnica inédita. En la fase de ensamblado del monocasco en Dieppe, se integran placas de acero a la estructura que se fijan por pegado y después con pernos y se protegen mediante cataforesis. Estas placas sirven después como puntos de anclaje en los tubos de acero que garantizan la seguridad del piloto.
Listo para competir, el Alpine A110 Cup se entrega con una serie de elementos de seguridad de gama alta: asiento baquet Sabelt específico con reposacabezas, arnés de seis puntos compatible Hans, extintor automático, batería seca, cortacircuito… Al igual que en el Alpine A110 de serie, el circuito de frenado es de Brembo. De una sola pieza de magnesio, las pinzas de seis pistones de última generación agarran unos imponentes discos ventilados de 355 mm (delante) y 330 mm (atrás). El Alpine A110 Cup está dotado de sistemas ABS y antipatinado regulables y desactivables.
Debajo del capó, el Alpine A110 Cup da cobijo al motor 1,8L turbocomprimido de inyección directa del coche de serie. Con un filtro de aire y una línea de escape específicos para la competición, la potencia del Cup sube a 270 CV (+18 CV) con un par sin cambios de 320 Nm. La gestión electrónica se realiza mediante un cajetín electrónico Magneti-Marelli SRG 140 de última generación que además incorpora el sistema de adquisición de datos del motor y del chasis. Este motor está acoplado a una caja de velocidades secuencial de seis marchas específicamente desarrollada en el marco de una colaboración entre Signatech y 3MO. Está equipada con un diferencial autoblocante con deslizamiento limitado.
El habitáculo del Alpine A110 Cup ha sido pensado para ofrecer placer y confort máximos a su ocupante. Bien sujeto en el asiento baquet con reposacabezas Sabelt, el piloto se encuentra frente a un volante XAP especialmente desarrollado para el Alpine A110 Cup e inspirado en el del Alpine A470. Al igual que cada uno de los componentes del coche, este volante es el reflejo de una calidad percibida inusual en la categoría. Incorpora las palancas de mando de la caja, una original cuadro de instrumentos digital y todos los contactores útiles (cartografías de dirección, antipatinado y ABS, pit limiter, radio, activación de la bebida…). Los pedales y la columna de dirección regulables permiten adaptar la posición de conducción para todos los tamaños. El Alpine A110 Cup conserva la climatización de origen y permite adaptar, sin modificación, un segundo asiento baquet para bautismos en pista.