A solo un mes de despedir definitivamente el año y de dar la bienvenida al 2018, toca hacer repaso de todo lo que queremos cambiar y preparar los propósitos del nuevo año.
En este contexto, el sector bancario también se une a estas reflexiones de diciembre para repasar un año en el que, sin duda, la mejora de la tecnología se ha convertido en protagonista dentro de cada entidad, seguida de las fusiones de bancos o los tipos en mínimos.
Tres puntos que se espera que se intensifiquen todavía más en 2018. Así lo afirman desde el comparador de productos financieros HelpMycash.com, que nos trae un análisis de lo que podemos esperar de los bancos en 2018.
Una fuerte apuesta por la tecnología
Si tuviésemos que elegir un único sector en el que la banca ha centrado sus esfuerzos en 2017, sería el tecnológico. Sobre todo, a finales de año, hemos visto como más y más bancos lanzaban sus propias aplicaciones o anunciaban alianzas con fintech para así digitalizar sus servicios.
Pero en 2018 la apuesta tecnológica se intensificará. La competencia de las fintech, que cada vez está ganando más y más adeptos, ha hecho que los bancos se plantearan su negocio y, poco a poco, lo fuesen trasladando hacia un sector digital. Y si este año los bancos han ido plantando su semilla, en 2018 veremos los frutos: transferencias bancarias inmediatas, posibilidad de contratar productos en cuestión de segundos o catálogos de productos personalizados y adaptados a las necesidades de cada cliente.
Seguimos con la política de tipos en mínimos
Según el Banco Central Europeo, no hay previsiones de subir los tipos de interés, al menos, hasta diciembre de 2018, por lo que a los bancos aún les queda un largo año para afrontar las políticas de tipos en mínimos.
Para las entidades esta situación está siendo bastante dura porque está provocando bajas rentabilidades en sus balances. Pero para los clientes también tiene efecto, ya que influye en algunos productos bancarios. Los más afectados, los depósitos a plazo fijo, que parece que seguirán con la tendencia de rentabilidades en mínimos a lo largo de todo el año, ya que a los bancos no les sale a cuenta pagar nada a sus clientes por sus ahorros.
Y los más afortunados, los hipotecados con préstamos variables. El índice de referencia por excelencia de las hipotecas, el euríbor a 12 meses, seguirá cotizando en negativo o en valores muy bajos, por lo que las cuotas mensuales seguirán siendo bajas.
Cierre de oficinas y despidos
En 2017 se anunciaron dos importantes fusiones, la de Santander con Popular y la de Bankia con BMN. Y la unión de estos dos bancos se materializará definitivamente en 2018. ¿Las consecuencias? Cierre de oficinas y ajustes de plantilla. Si bien durante 2017 ya fuimos testigos del cierre de muchas sucursales bancarias, en 2018 se intensificará, sobre todo en los que se han unido.
Pero los cierres de oficinas y ajustes de plantilla no solo se darán en estos bancos, sino que lo más probable es que el resto de las entidades siga esta misma tendencia. Debido a la baja rentabilidad y a la transición hacia un mundo digital, el modelo de oficina bancaria ya no es tan imprescindible y disponer de muchas sucursales se ha convertido en un lastre para algunos bancos. Por tanto, es probable que, a lo largo del año, seamos testigos del cierre de más y más oficinas.