Con el descenso del -0,26% este viernes, el Ibex hace pleno y cuenta todas las sesiones de la semana por caídas.
Se va de fin de semana en los 10.150 puntos preocupado por Inditex, que es uno de los pesos pesados del selectivo y que desde la reacción inicial que tuvo tras presentar resultados el miércoles, ya se ha dejado un -7%.
En el resto de bolsas europeas ha dado la cara el DAX alemán (+0,27%) pero han caído tanto el CAC francés (-0,15%) como el MIB italiano (-0,44%). Todo lo contrario que al otro lado del charco, donde las bolsas neoyorquinas avanzan a paso firme.
Durante la sesión hemos contado con escasas referencias desde el punto de vista macro y con la particularidad de que hoy vencían los contratos de derivados de diciembre (Cuádruple Hora Bruja). Entre los pocos datos publicados hoy se han encontrado dos, ambos peores de lo previsto: la producción industrial americana (+0,2% vs +0,3% previsto) y el Empire Manufactirero (18 puntos vs 18,7 estimados).
A nivel político se ha hablado de la cumbre de la U.E. y de la cada vez más cercana firma de la reforma fiscal por parte de Donald Trump. También de Italia, donde la inestabilidad del gobierno ha provocado hoy que la deuda italiana a diez años ya aporte más rentabilidad que la portuguesa (1,80% vs 1,77%). Aquí en España, a unos días del 21-D, la rentabilidad se mantiene en el 1,44% y la prima de riesgo en los 114 puntos básicos.
A nivel empresarial Inditex ha vuelto a ser farolillo rojo lastrada hoy por una cifra de ventas mucho peor de lo esperado por parte de su rival H&M, que ha perdido un -14% en la bolsa de Suecia. Le ha seguido Bankia (-2,35%), que no levanta cabeza desde que el Estado se desprendiese el pasado lunes de una participación del 7%.
En el lado de las ganancias la más importante ha sido la de Ferrovial (+1,58%) gracias la recomendación de ‘sobreponderar’ que le ha otorgado la casa de análisis de Credit Suisse. A continuación se han situado Siemens Gamesa (+1,30%) y ACS (+1%).
El mercado da por concluida una semana que ha estado marcada por los bancos centrales e iniciará otra el lunes con la mirada puesta en las elecciones catalanas del jueves. Aunque las encuestas dejan entrever un resultado apretado, el mercado tratará de encontrar en él una excusa para dar un arreón final antes de que acabe el año.