Una de las edificaciones más características en Galicia son los pazos, antiguas casas solariegas de extensos jardines, pertenecientes a la nobleza gallega.
Una de las variedades de turismo que más de moda está en la actualidad es el enoturismo. El turismo del vino está viviendo un gran auge en los últimos tiempos ya que cada vez son más las personas que quieren combinar su pasión por el vino con nuevas experiencias turísticas: visitas a bodegas, paseos por viñedos, o actividades al aire libre en las que el vino cobra un papel protagonista. Muestra de la buena salud del sector son los últimos datos facilitados por la Asociación Española de Ciudades del Vino (Acetín), que señala un crecimiento del enoturismo de un 21% en el último año en España, con 2,7 millones de visitantes, 471.469 más que en el año anterior.
Galicia y sus pazos
Una de las edificaciones más características en Galicia son los pazos, antiguas casas solariegas de extensos jardines, pertenecientes a la nobleza gallega. Muchos de ellos siguen en manos privadas, mientras que otros son de titularidad pública. En ambos casos, nos encontramos algunos que pueden visitarse.
Hoy, te proponemos conocer uno de los cinco pazos más bellos de la provincia de Pontevedra, en los que podrás pasear por sus jardines, disfrutar de su museo y degustar recomendables vinos.
Torre la Moreira es un pazo fortificado en el que se encuentran, desde 1968, las bodegas de la marca Marqués de Vizhoja. A su alrededor se extienden numerosos viñedos escalonados, cuya extensión atravesaba un camino romano.
La bodega primitiva se ha remodelado y reconvertido en museo, y en sus jardines se hallan árboles centenarios, hórreos, y la Capilla de la Virgen del Carmen. Se realizan visitas guiadas a la finca y a las bodegas, así como degustaciones de sus vinos.
Bodegas Marqués de Vizhoja, una gran familia
Todo comienza en Finca La Moreira, en un antiguo secadero de tabaco reconvertido en bodega, donde la modernidad de los depósitos de acero inoxidable con control de temperatura, ha dado paso a la nueva y actual forma de elaborar los vinos y continua en el Pazo La Moreira como sede del imaginario Marquesado de Vizhoja; un edificio icónico y representativo de la antigua nobleza gallega y de las formas tradicionales de cultivo y explotación de la tierra.
La gran belleza del paisaje conformado por los viñedos que envuelven las bodegas permite imaginar la excelente calidad de los albariños que se producen en estas tierras. Esta excelencia es lograda en parte gracias a la perfecta localización de la Finca La Moreira y a la calidad de la tierra existente en el Condado do Tea. El favorecedor clima, propiciado por la cercanía del Río Miño, los suelos graníticos y la inclinación de su ladera favorece la protección de los viñedos de las heladas, los vientos y las temperaturas extremas. La orografía juega también un papel muy importante ya que permite un drenaje natural hacia el Río Miño, consiguiendo así unas cualidades de un terreno privilegiado que se manifiestan en las uvas de albariño, loureira y treixadura de Bodegas Marqués de Vizhoja. Además, gracias a su situación geográfica privilegiada, no hay problemas de aireación, soleado o exceso de humedad, logrando así sus uvas albariño, loureira y treixadura al equilibrio de acidez Óptimo y dando resultado a producciones de excepcional calidad.
Bodegas Marqués de Vizhoja, el proyecto personal de Mariano Peláez, fue fundada en 1968, y en la actualidad es un referente del sector vinícola gracias a sus hijos, Jorge Peláez y Javier Peláez, presidente y enólogo de la bodega.