Hay varios argumentos que justifican el incremento del uso de las aplicaciones informáticas en la nube, argumentos, que como explican los responsables de Datisa, esgrimen tanto las grandes corporaciones como las empresas más pequeñas. Además de la flexibilidad, la escalabilidad la funcionalidad o el precio, la seguridad ha dejado de ser el elemento que terminaba por paralizar la puesta en marcha de los proyectos cloud, porque está perfectamente asumido que se trata de una cualidad inherente a la esencia de la propia tecnología.
Cada cierto tiempo el mercado va poniendo de moda, términos que unas veces acaban imponiéndose y otras, terminan sus días durmiendo el sueño de los justos. Los responsables de
Datisa hacen esta reflexión, teniendo en cuenta que el cloud ha dejado de ser una tecnología de moda. Y es así, porque como aseguran desde el fabricante español de ERP para pymes, el mercado ha asumido la nube como una alternativa fiable para implementar sus soluciones tecnológicas que les permitan optimizar la gestión de su negocio.
Sin embargo, aunque el cloud empieza a ser un elemente diferenciador, sólo cuando no se utiliza, aunque sea en algunas áreas o en algún contexto, entorno o apartado de la propia organización, es una tecnología de la que aún quedan muchos renglones por escribir. Isabel Pomar, directora comercial y de marketing de Datisa, explica que “lo que trata de definir el mercado y los actores que formamos parte del entorno tecnológico es qué tipo de nube será la preponderante en los próximos años. Desde nuestro punto de vista, y poniendo el foco en las pequeñas y medianas empresas, pensamos que la nube híbrida, será la opción preferida por este tipo de organizaciones”.
Ahora bien, aunque el mercado vaya marcando una tendencia más o menos clara, en Datisa tienen claro que debe ser siempre la organización que vaya a hacer uso de la tecnología quien decida en última instancia, en base a sus necesidades, a sus requerimientos, a sus prioridades, a su situación en un momento concreto o a sus expectativas de futuro.
Además de los argumentos que se mencionan como palancas dinamizadoras del cloud, la movilidad y su obligatoriedad de uso prácticamente en todas las organizaciones también ha contribuido a impulsar el uso del cloud en las pymes. Isabel Pomar dice que “la movilidad es indiscutible. Hoy por hoy, muy pocas empresas se plantean si deben o no facilitar el acceso a sus aplicaciones desde cualquier sitio y en cualquier momento, incluso en las pymes más pequeñas”.
En definitiva, la nube ha hecho que se reduzcan los tiempos de implementación, repercutiendo en una mejora de la percepción, a nivel interno, pero también ha acelerado la consecución de los beneficios que reporta el uso de un sistema de gestión empresarial.
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