Las bolsas europeas han comenzado la jornada en rojo, recogiendo beneficios tras registrar ayer la sesión más alcista de lo que llevamos de año.
Las caídas en torno al -0,50% han sido un mal menor teniendo en cuenta que en las últimas horas se han intensificado las tensiones comerciales entre EE.UU. y China.
A diferencia de otras veces, en esta ocasión la publicación del informe de empleo americano no ha condicionado la sesión, a pesar de haber sido peor de lo esperado. Mientras que el consenso apuntaba a la creación de 185.000 nóminas y un descenso de una décima en la tasa de desempleo, finalmente las nóminas quedaron en 103.000 y la tasa de paro repitió en el 4,1%. Donde no ha habido sorpresas ha sido el la previsión de crecimiento de salarios, que se fija en +2,7%. Las reacciones en los mercados no han sido significativas salvo por la subida del eurodólar (hasta 1,227) y de los bonos americanos, lo que se puede interpretar como que la Fed será cauta a la hora de seguir subiendo tipos.
El dato de producción industrial de Alemania publicado a primera hora también ha resultado ser peor de lo esperado: +2,6% en febrero, vs +5,5% en enero y +4,4% estimado.
Tampoco está impactando dentro del plano político el espaldarazo que supone para el independentismo catalán la decisión de la justicia alemana sobre la liberación de Puigdemont.
El Ibex 35 se deja -0,60% y retrocede hasta 9.682,80 puntos, a pesar del repunte de valores como Siemens Gamesa (+3,28%) o Acciona (+1,42%), que cuentan hoy con el respaldo de los analistas de Goldman Sachs. En el caso de IAG, la subida de hoy viene determinada por el abaratamiento del petróleo, con el barril Brent de nuevo por debajo de los 68 dólares.
Otro factor a tener en cuenta y que explica en parte los números rojos del Ibex es el descuento de dividendo de 0,15 euros por parte de BBVA. Este representa un descuento del 2,3% para el banco, que al tener una ponderación del 8% en el Ibex, se traduce en una caída de 20 puntos básicos en el Ibex en la jornada de hoy.
Otro protagonista ha sido OHL, que se conseguido un contrato para la modernización de una línea ferroviaria en República Checa, por un valor de unos 172 Mn€.
El bono a 10 años se despide con una rentabilidad cercana al 1,2%, con la prima de riesgo rondando los 70 puntos básicos.
El asunto de la guerra comercial, con EEUU y China como actores principales, se ha convertido en el principal condicionante de las bolsas. De cara a la próxima semana empezarán a ganar peso losresultados corporativos del primer trimestre que, como es habitual, iniciarán los grandes bancos de inversión americanos como JP Morgan o Citigroup.
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