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Toyota Prius Hybrid 2018

Toyota Prius Hybrid 2018
Ampliar

Más seguro, más equipado, más atractivo

Por Mariano García Viana
lunes 09 de abril de 2018, 09:56h

A finales de 1997 Toyota sorprendió al mercado con el lanzamiento de un modelo híbrido que no era un simple Concept Car, sino toda una propuesta de un coche que se fabricaría en serie. Veinte años después aquel modelo denominado Prius se ha convertido en todo un símbolo en lo que a modelos híbridos y eficientes se refiere.

Toyota ha seguido la senda que inició el Prius y ha incorporado a la mayoría de sus modelos la tecnología híbrida, tanto que ya más de 11 millones de conductores de todo el mundo conducen algún modelo híbrido de Toyota. Ahora, la cuarta generación del Prius, viene a ofrecer una serie de mejoras técnicas que mejoran aún más las cualidades del vehículo. De entrada estrena la Nueva Arquitectura Global de Toyota, que también utiliza el original C-HR. En cuanto a la motorización también el nuevo Prius incorpora la última evolución del sistema de propulsión híbrida, la Full Hybrid, que proporciona un mejor rendimiento.

El motor, revisado, es el 1.800 c.c.VVT-i de ciclo Atkinson, que varía con respecto al ciclo Otto, el que se utiliza de forma habitual en la mayoría de los coches, entre otras cosas, en tener una mayor compresión, un menor recorrido del pistón, que la válvula de admisión permanezca abierta durante parte de la carrera del pistón, lo que provoca un cierto reflujo de gases hacia el colector de admisión mientras el pistón asciende, lo que da como consecuencia un menor gasto de gasolina como consecuencia de utilizar una menor mezcla de aire-gasolina dentro del cilindro. La parte inconveniente es que el par y la potencia son menores. Para terminar con esta breve explicación mecánica, digamos que los motores de ciclo Atkinson, a pesar de ofrecer un menor rendimiento dinámico, los hace compañeros ideales de un motor eléctrico. El torque producido por el propulsor híbrido, se entrega casi al instante, compensando la falta de poder del propulsor térmico, hasta que éste se encuentre en un rango óptimo. Alcanzado este rango el motor a gasolina compensa la menor potencia del motor eléctrico y lo releva de su tarea. De esta manera se logra un consumo de combustible y batería adecuado a nuestras necesidades.

Pero bueno, sigamos a lo nuestro que es describir el nuevo Prius y el resultado de su prueba, dejando la explicación anterior para aquellos que tengan curiosidad en saber porque la mayoría de los híbridos equipan motores de ciclo Atkinson. La potencia que proporciona el 1.8 de gasolina del Prius es de 98 CV, mientras que la parte eléctrica tiene un rendimiento de 72 CV. Este motor dispone en esta cuarta generación de un nuevo transeje híbrido, que aloja en su interior dos motores-generadores eléctricos, un engranaje planetario y un engranaje reductor en la transmisión final. Uno de los dos motores eléctricos sirve básicamente como generador, al convertir la potencia sobrante del propulsor de gasolina en electricidad, almacenando ésta en una batería de hidruro de níquel (NiMH), mientras que el otro, es el responsable de la tracción eléctrica, funcionando también como generador cuando Prius está en modo de frenado regenerador. La potencia total de la que se dispone es de 122 CV, lo que permite al Prius seguir siendo referencia en lo que a eficiencia y bajo nivel de emisiones se refiere, gracias a un consumo medio homologado de solo 3,3 l/100 km y unas emisiones de solo 76 g/km de CO2, por lo que puede lucir en su parabrisas el tan de moda adhesivo verde de la DGT, con las ventajas que supone para circular por Madrid y otras poblaciones españolas en determinadas circunstancias de contaminación.

Exteriormente el Prius de esta cuarta generación ha recibido cambios de diseño que, si bien conservan la fisonomía del modelo desde su nacimiento, aportan un toque de modernidad e incluso de futurismo, gracias a sus angulosas líneas, que salvo el techo y el capó motor, dominan la carrocería. Así el frontal incorpora unos nuevos faros de led, estrechos y angulosos que se prolongan lateralmente. A cada lado del paragolpes unas formas triangulares verticales contienen los igualmente triangulares faros antiniebla. Lateralmente su abombado techo muy inclinado hacia atrás anuncia claramente que es un Prius, pero ahora desde casi el inicio de la puerta trasera el relieve de una prominente forma se eleva hasta el final de la primera parte de la luneta, dejando entrever que esta parte trasera es la que más se diferencia de generaciones anteriores del modelo y donde los diseñadores de Toyota han derrochado más creatividad. La citada prominente forma llega a los grupos ópticos y se prolonga a todo lo ancho del coche dividiendo en dos la luneta, una parte superior inclinada y otra mucho más pequeña vertical, lo que, como hemos podido comprobar facilita la visión del conductor hacia atrás. Los pilotos verticales y también con mucho relieve y ángulos marcados, se prolongan desde el citado alerón hasta la mitad del paragolpes. En cuanto a sus medidas, si bien la distancia entre ejes es la misma de versiones anteriores, la longitud ha crecido en 60 mm. y la anchura en 15 mm.,. mientras que la altura se ha rebajado en 20 mm. En conjunto un modelo inconfundiblemente Toyota con el toque futurista de sus diseños de los últimos años.

Con este aumento de medidas, el habitáculo resulta lógicamente más amplio y confortable, pues además se han reajustado algunos elementos como el volante que ahora es redondo y no ovalado como antes. En la parte alta del salpicadero y en el centro, nos encontramos dos pantallas LCD TFT de 4,2 pulgadas, que hacen las veces de cuadro de instrumentos. La pantalla más cercana al conductor presenta la velocidad del vehículo y otra información adicional como el nivel de combustible, el cuentakilómetros y el cuentakilómetros parcial, la autonomía restante, el consumo de combustible promedio, la temperatura exterior y el modo de conducción. El color de fondo cambia en función del modo de conducción seleccionado: azul para la conducción ‘ECO’, gris blanquecino para la ‘Normal’ y rojo para la ‘Power’. La segunda pantalla proporciona información sobre el sistema híbrido y recomendaciones para una conducción más ecológica y un mayor rendimiento, junto con detalles del sistema multimedia, el climatizador y alertas de asistencia al conductor. Todo muy fácil de leer e interpretar aunque quizás abrume un poco tanta información.

En la parte alta de la consola, también de forma prominente se sitúan dos salidas de aire y la pantalla táctil de 7 pulgadas que permite controlar las funciones de audio y navegación con los menús sencillos e intuitivos. El equipo de audio JBL con 10 altavoces emplea tecnología GreenEdge y proporciona un sonido potente de excelente calidad mediante unos altavoces más pequeños y ligeros y con más eficiencia energética. Los asientos son confortables y permiten viajes largos sin que haya síntomas de cansancio, la postura ante el volante esta también muy conseguida pues desde ellas se domina todo lo que ocurre alrededor. El maletero tiene una capacidad de 457 litros, si lleva rueda “galleta” o 502 si se lleva kit antipinchazos. Pero en lo que ha ganado el Prius con respecto al otras versiones anteriores es en seguridad, ya que al Toyota Safety Sense, un conjunto de sistemas de seguridad y ayuda a la conducción, como el Sistema de seguridad precolisión —Pre-Collision System (PCS)— con una función de Detección de Peatones, el Control de Crucero Adaptativo —Adaptive Cruise Control (ACC)—, el Avisador de Cambio Involuntario de Carril —Lane Departure Alert (LDA)—, el Control Inteligente de Luces de Carretera —Automatic High Beam (AHB)—, el Reconocimiento de Señales de Tráfico —Road Sign Assist (RSA)—. el Detector de Ángulo Muerto —Blind Spot Monitor (BSM)—, la Asistencia al Arranque en Pendiente —Hill-start Assist Control (HAC)—, el control dinámico de estabilidad, tracción y dirección o los airbags frontales y laterales para conductor y acompañante, de cortina delanteros y traseros y de rodilla para el conductor, se une ahora también el sistema de Alerta de Tráfico Trasero —Rear Cross Traffic Alert (RCTA)— que se vale del radar del Detector de Ángulo Muerto para avisar al conductor, al salir marcha atrás de una plaza de aparcamiento, de los vehículos que se acercan y que pueden no ser visibles por el monitor de visión trasera ni los retrovisores. Todo un compendio de medidas de seguridad que han hecho del Prius el coche más seguro de su clase.

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