“La exitosa gestión integrada del margen, unida a la normalización de las condiciones de mercado, la mejora significativa del margen del gas, la buena evolución del negocio regulado y la reducción de los costes fijos de la compañía, fruto de los planes de eficiencia aplicados en los últimos años, han sido la clave de los excelentes resultados alcanzados en este primer trimestre. Estamos en el buen camino para alcanzar los objetivos comprometidos para 2018”, ha asegurado el consejero delegado de Endesa, José Bogas.
La evolución de los resultados de Endesa del primer trimestre del año ha sido muy positiva, con crecimientos muy elevados en EBITDA, EBIT y beneficio neto. Este mejor comportamiento se ha debido en parte a que, en 2017, se registraron en España unas condiciones de mercado muy negativas. Estas circunstancias dieron lugar a unos precios extraordinariamente altos de la energía en el mercado mayorista, que afectaron desfavorablemente a los resultados de la compañía. Por el contrario, en el primer trimestre de 2018, esta situación se ha normalizado gracias a la mayor disponibilidad de las centrales hidráulicas y de las energías renovables, lo que ha provocado un descenso del 13,5% en los precios del mercado mayorista de electricidad.
En la evolución del EBITDA (+25%), cabe tener en cuenta los siguientes factores:
- La estrategia de la compañía en el negocio liberalizado ha permitido incrementar en un 38% el margen, lo que ha llevado a que el EBITDA de este negocio haya crecido un 113%. Esto se ha producido gracias a:
- Un escenario en el que los precios de la electricidad en el mercado mayorista han caído un 13,5%.
- El negocio del gas ha experimentado una mejora significativa que le ha facilitado aportar 54 millones de euros al margen bruto durante el primer trimestre del año, frente a unas pérdidas de 20 millones de euros en el mismo periodo de 2017.
- El negocio regulado ha incrementado su margen en un 1%, principalmente por la mejora en la retribución de la distribución.
- La evolución de los gastos fijos de explotación se ha mantenido en línea con el mismo periodo del año anterior, y, en términos homogéneos, se han reducido un 4% como consecuencia, principalmente, de la reducción de los gastos de personal (-3,2%).
- El resultado de explotación (EBIT) ha crecido un 49% debido al incremento del EBITDA ya comentado y a que los costes de amortización se han mantenido estables.
- Como consecuencia de todos estos factores, el beneficio neto ha crecido un 47%.
Cash flow operativo, deuda financiera neta e inversiones
- El cash flow operativo ha sido muy bajo debido a la prevista y excepcional evolución del capital circulante. Esta situación se irá corrigiendo en el transcurso del ejercicio.
- La deuda financiera neta ha aumentado en 1.062 millones de euros con respecto a 31 de diciembre de 2017 como consecuencia de varios factores, entre los que destaca la mencionada evolución del capital circulante -y su impacto en el cash flow operativo- y el pago, en el mes de enero de 2018, de un dividendo a cuenta del ejercicio 2017 por importe de 0,7 euros brutos por acción, lo que ha supuesto un desembolso de 741 millones de euros.
- Las inversiones brutas se han situado en 197 millones de euros (+18%).
Resultados operativos