El presidente de la Cámara reclama celeridad en la firma del convenio que lo hará posible y concreción en el calendario de inicio de las obras.
El presidente de la
Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, valora muy positivamente el compromiso del ministro de Fomento, José Luis Ábalos de sacar adelante el proyecto de soterramiento de las vías del tren en L'Hospitalet, que actualmente dividen la ciudad entre norte y sur.
Miquel Valls considera que "es una obra fundamental para Cataluña desde el punto de vista económico, social y medioambiental", que tiene que ir ligada a la construcción del túnel de la línea R2 de Cercanías y del intercambiador de la Torrassa - que conectará las líneas 1 y 9 del metro con Cercanías de Renfe.
El proyecto ejecutivo del proyecto está hecho desde noviembre de 2009, es por eso que el presidente de la Cámara reclama que "la firma del convenio se realice con la máxima celeridad posible y se acompañe del calendario de inicio obras".
Se trata de una histórica reivindicación, que permitirá importantes mejoras en la red de Cercanías. "Es una infraestructura fundamental para el desarrollo económico del Hospitalet, pero también para la región metropolitana", afirma Valls. En este sentido, la construcción del túnel mejoraría el transporte público para los aproximadamente 5 millones de habitantes de la región metropolitana.
Miquel Valls considera que "esta infraestructura convertiría la red de Cercanías de Renfe en el metro regional de Cataluña". Miquel Valls, alerta de que "la no construcción de la obra unida a la reactivación económica, que conlleva una mayor utilización del vehículo, provocarán que se agrave el colapso circulatorio en los principales accesos a la ciudad de Barcelona, así como un aumento los índices de contaminación actuales ".
La ejecución del proyecto permitiría la reconfiguración de la red, dar continuidad a las líneas costa a costa (Vilanova-Mataró) e interior a interior (Vilafranca-Granollers) y equilibrar la carga de circulación de los túneles de paseo de Gracia y plaza de Cataluña , para incrementar frecuencias. También permitiría mejorar la conexión ferroviaria de Barcelona con el Aeropuerto e incrementar la oferta de servicios entre el Prat y Sants, ya que rebajaría el nivel de saturación actual de la línea R2.
El proyecto del nuevo túnel en L'Hospitalet integraría la Estación Central de la Torrassa, que será el intercambiador de referencia del sur de Barcelona. El intercambiador de la Torrassa daría servicio a cerca de 90.000 viajes diarios, de los cuales la mitad realizarían intercambios modales, que lo situarán entre los 5 intercambiadores con más demanda intermodal de la región metropolitana.
El intercambiador de la Torrassa uniría las líneas 1 y 9 del metro con las líneas de Vilanova y de Vilafranca de Cercanías. Igualmente, el proyecto incluiría la construcción de una estación subterránea de Bellvitge-Gornal, lo que daría un mejor servicio a estos barrios. También canalizaría los movimientos entre el ámbito sur del Baix Llobregat y el ámbito central y oeste de la ciudad de Barcelona, además de las zonas logísticas del Puerto y el Aeropuerto.
Este proyecto permitiría transformar nuevo suelo que se destinaría a localizar nuevas actividades económicas, en un entorno que destaca por su capacidad de atraer actividades vinculadas a sectores estratégicos.